William Briones Loáisiga [email protected]
Irving Dávila, líder de uno de los grupos que disienten de la conducción oficial en el FSLN, aseguró que ese partido afronta una seria crisis de liderazgo, que se denota en la posición dual que mantiene ante el gobierno de Enrique Bolaños y el diputado Arnoldo Alemán, con quien Daniel Ortega pactó en el 2000.
“Hay una crisis de identidad, organización y representatividad. Hay una dualidad en su relación con el grupo que lidera Alemán y con el gobierno, así como la hay en relación a la defensa de los intereses populares”, observó.
Consideró que en el Congreso están dadas todas las condiciones para perpetuar a Ortega. “En la actualidad, la estructura está diseñada para fortalecer la figura de Daniel Ortega, ahí no va a haber ningún cambio. Lo importante es que entiendan y planteen en el Congreso que Ortega no puede volver a ser candidato (presidencial) porque es el clamor de la base”, consideró.
Indicó que en la base del sandinismo, existe el sentimiento de que Ortega no debe pensar en un relanzamiento “y en caso que lo haga, expone a una fractura al sandinismo y a la desintegración del partido, porque no estaríamos dispuestos a apoyarlo”, adelantó.