Un poco más de 20 mil hectáreas de bosques en la zona núcleo de la Reserva de Biosfera Bosawas, Región Autónoma del Atlántico Norte (RAAN), podrían desaparecer en las próximas horas o semanas, por la acción de “vendedores ilegales y depredadores” quienes planean tumbar los árboles para convertir la zona en un área de pastizales para la ganadería y siembra de frijoles, arroz, yuca y plátanos.
La denuncia la hizo Blanca Molina, asesora legal del territorio tres Mayangna Sauni Bas, quien a la vez llamó a las autoridades nacionales correspondientes a actuar de inmediato para detener este delito ambiental.
- El especialista en Medio Ambiente, Kamilo Lara, indicó que total el área en peligro de desaparecer podría superar las 43,241 hectáreas.
Si esos bosques desaparecen, son talados, estaríamos poniendo más aves en la lista roja de las especies de extinción, añadió.
Por su parte el diputado Agustín Jarquín, aseguró que de concretarse la depredación del bosque se amenaza el abastecimiento de agua y actividades productivas de Siuna y sus comunidades, así como el proyecto hidroeléctrico Ye-Ye, pues la destrucción del bosque se planea en los orígenes de los ríos Puput, Wasma y Uly.
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La abogada informó que en un recorrido de 15 días por la zona descubrieron a más de 37 familias asentadas en sus “territorios”, mientras que otras dijeron que recibían alguna compensación por cuidar terrenos de terceras personas.
En el lugar pudieron comprobar que hay miles de hectáreas de bosques en donde se realizaron labores de carrileo y socoleo.
“Hay un despale indiscriminado, habrá un despale indiscriminado a tala raza, todos los árboles no son tumbados para comercializar madera sino para pegarles fuego, una vez quemado siembran maíz, frijol”, dijo Molina.
El lugar en cuestión se encuentra a 200 kilómetros de Siuna, a unas seis horas de camino.
QUIENES VENDEN
El diputado Agustín Jarquín, aliado del Frente Sandinista en la Asamblea Nacional y presidente de la Comisión de Población, Desarrollo y Municipios, acompañó a la abogada Blanca Molina al momento de realizar la denuncia.
El parlamentario dijo que las primeras averiguaciones indican que las tierras han sido vendidas de forma ilegal por miembros del Consejo Regional de la RAAN como Justiniano Treminio y funcionarios de la Alcaldía de Siuna como Etanislao Pravia, Ernesto García, Arnulfo Miranda y Francisco Sevilla.
De estas personas hay varias escrituras con sus firmas y hasta números de cédulas de identidad.
Jarquín agregó que los indígenas son dueños de estos territorios, no sólo por tener los derechos ancestrales, sino porque el gobierno de Daniel Ortega les entregó sus títulos de propiedad en coordinación con la Procuraduría General de la República (PGR) bajo la Ley 445 o Ley del Régimen de Propiedad Comunal de los Pueblos Indígenas y Comunidades Étnicas.
“Se requiere una presencia permanente de las entidades necesarias en estos lugares, a lo inmediato, porque si no no sólo se van a ver afectados los derechos de la población indígena sino los de derechos del país, porque se está tocando el corazón de la reserva núcleo de Bosawas”, manifestó el parlamentario.
La Reserva de Bosawas se encuentra compartida por la RAAN, el departamento de Jinotega y en una pequeña parte por el departamento de Nueva Segovia. Fue declarada Reserva de la Biosfera por la Unesco en 1997.
Los expertos en medio ambiente han señalado esta zona como la mayor reserva forestal de Centroamérica y la tercera a nivel mundial. Es uno de los mejores ejemplos de bosque tropical húmedo.
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