Eduardo Cruz
El juez Séptimo Distrito de lo Penal de Audiencia de Managua, Octavio Rothschuh, dictó una clausura anticipada al juicio conocido como Marca Móvil, debido a que ninguna de las pruebas evacuadas durante el proceso señalan a las dos únicas acusadas.
De esta manera, la venezolana Karen Vanegas y la nicaragüense Irene Peralta Muñoz,quedaron libres de todo cargo en la gran estafa que afectó a más de 1,800 personas a quienes les causó un perjuicio económico superior a los 28 millones de córdobas.
Vanegas y Peralta, eran procesadas como encubridoras del principal autor de la estafa,Jorge Tirado Chávez, quien según las investigaciones de la Policía Nacional, en realidad se llama Eduardo Max Cortina Pineda, prófugo de la justicia.
De acuerdo a las investigaciones policiales, éste salió del país el 14 de octubre del año pasado rumbo a Panamá, llevándose un millón 362 mil 711 dólares, equivalentes a 28 millones 71 mil 864.50 córdobas.
La defensora de Vanegas y Peralta pidieron la clausura anticipada del juicio porque los testigos, casi todos víctimas de la estafa, nunca mencionaron a las procesadas,sólo a Aura Montalván como la persona a quienes ellos le entregaban el dinero para obtener carros y motocicletas ofrecidas por la Marca Móvil.