RIO DE JANEIRO / AP
La policía dijo que presuntos narcotraficantes arrojaron una bomba incendiaria a un autobús de cercanías en Río y atraparon en su interior a 20 viajeros. Aunque nadie murió, 13 personas sufrieron quemaduras y cinco se encuentran en estado grave.
El ataque ocurrido anoche en el barrio marginal Ciudad de Dios, en el oeste de Río, fue una represalia por la detención de un narcotraficante local, apuntó la Policía. Hasta ahora no se realizaron detenciones.
Las autoridades desalojaron hace un año de la zona a los narcotraficantes, aunque cesar la violencia y el narcotráfico no ha sido tarea fácil.
Los traficantes queman con frecuencia autobuses en Río como una forma de protesta, pero en general permiten primero que se bajen los viajeros.
Por otra parte, la policía mató a dos presuntos narcotraficantes en un tiroteo mantenido a primeras horas del miércoles en un barrio marginal del norte de Río.