La Habana/EFE
Los cuatro disidentes cubanos presos que iniciaron huelga de hambre la semana pasada, tras la muerte del opositor encarcelado Orlando Zapata al cabo de un ayuno de 85 días, abandonaron ya su protesta, dijeron hoy a Efe fuentes de la disidencia.
Fidel Suárez, que cumple una condena de 20 años en el penal “Kilo 8” de la provincia occidental de Pinar del Río, fue el último del grupo en dejar la huelga, después de que sus tres compañeros lo hicieran en los últimos días.
La noticia fue confirmada en momentos en que el disidente cubano Guillermo Fariñas, en huelga de hambre y sed desde hace siete días, se desmayó y fue trasladado por sus familiares a un hospital en la ciudad central de Santa Clara, donde vive.
El propio Fariñas insistió a los presos para que abandonaran su ayuno por la muerte de Zapata, reconocido como preso de conciencia por Amnistía Internacional, aunque el Gobierno cubano lo califica de delincuente común y a todos los opositores los llama “mercenarios” al servicio de Estados Unidos.
Además de Suárez, los presos que participaron en el ayuno son Diosdado González, Nelson Molinet y Eduardo Díaz Fleitas, que cumplen penas de entre 20 y 21 años en la cárcel “Kilo 5” de Pinar del Río.