ACAN-EFE
El jefe del Ejército de Nicaragua, el general Julio César Avilés, rechazó hoy que la Fuerza Naval de su país haya agredido la embarcación de un pescador hondureño que falleció en aguas nicaragüenses y aseguró el hombre murió al volcar su embarcación cuando huía hacia su país.
El Gobierno de Honduras anunció hoy que pediría explicaciones al de Managua por un incidente el sábado pasado en el Golfo de Fonseca, en el Pacífico, en el que murió el pescador hondureño Víctor Manuel Argeñal, de 21 años, tras ser supuestamente embestido por una patrullera de la Fuerza Naval nicaragüense.
El general Avilés explicó a periodistas durante una visita de cortesía a la junta directiva de la Asamblea Nacional que en la fecha del incidente la Fuerza Naval se dirigió a una zona de las aguas territoriales nicaragüenses en la que pescaban ilegalmente más de 30 embarcaciones hondureñas.
Según el jefe militar, la mayoría de las naves hondureñas huyeron con dirección a su país, pero una de ellas “hizo una mala maniobra y se volcó”.
Explicó que la Fuerza Naval detuvo a un pescador, cuya identidad no reveló y que aseguró ya fue dejado en libertad, y este reveló que había otra persona más en la embarcación.
“El otro lo comenzamos a buscar desde horas de la noche del sábado, pero suspendimos la búsqueda a mediodía del domingo”, agregó Avilés, al señalar que “presuntamente pues es un pescador que posteriormente en las costas nicarag enses aparece muerto”.
“Todo fue un accidente producto de la huida de las embarcaciones hondureñas al notar la presencia de las autoridades nacionales”, dijo, al asegurar que “no hubo agresión de las lanchas nicaragüenses” y que “tampoco se realizó ningún disparo” contra los pescadores hondureños.
El canciller hondureño, Mario Canahuati, reconoció a periodistas que “hay información cruzada” sobre el hecho y que Nicaragua señala que arrestó al pescador hondureño Víctor Manuel Argeñal, de 21 años, mientras que su acompañante, Adonys Rivas, “se lanzó al agua”.
El cadáver de Argeñal, según las autoridades hondureñas, apareció flotando ayer en el sector de Potosí, Nicaragua, mientras que Rivas, según su propio relato, después de nadar varias horas fue rescatado por una familia de pescadores nicaragüenses.