El vicario de la Catedral Metropolitana de Managua, padre Bismarck Conde, advirtió del riesgo que encierra la iniciativa de ley introducida en la Asamblea Nacional para la despenalización del aborto terapéutico. A criterio del religioso, lo que se está buscando es la legalización del aborto inducido.
“Como Iglesia siempre mantenemos nuestra postura de no al aborto, sí a la vida. Creo que en este sentido, tanto la Iglesia católica como la Iglesia evangélica mantenemos el mismo lenguaje, porque amamos un Dios que nos ha dado la vida y nos ha creado por amor”, dijo el padre Conde.
“Aun penalizado el aborto, todavía se sigue cometiendo el aborto. Imaginémonos que tal vez no existiera una ley (de penalización), ¿cuántos niños o niñas tal vez no tendrían la posibilidad de contemplar este mundo maravilloso que Dios ha creado para que podamos ser felices?”, se preguntó el padre Conde.
Para el religioso los movimientos contrarios a la vida han tomado de uno a tres casos, que a su criterio son aislados, “como una banderita de lucha”, para justificar el aborto terapéutico.
El vicario de Catedral indicó que la Iglesia católica confía en la madurez de todos los diputados, “porque también Dios les ha dado la vida para que estén allí, creemos en esa sensatez, en esa prudencia. Los legisladores pasan, yo me pongo a pensar que un legislador que está a favor del aborto, por ejemplo, al final se va (del parlamento) y se va a morir también. ¿Y qué le dirá a Dios? ¿Qué hice yo como legislador? Todos los hombres pasamos, Dios permanece eterno, es el Dios de la vida”, sostuvo.
Entre tanto, la Sociedad Nicaragüense de Ginecología y Obstetricia y la Sociedad de Médicos Generales enviaron un pronunciamiento donde respaldan la iniciativa de la despenalización del aborto terapéutico, para evitar “correr riesgos como el de ser encarcelados en el cumplimiento de nuestro deber de preservar la salud y salvar la vida de las mujeres”.
Al respecto, el secretario general del Ministerio de Salud (Minsa), Enrique Beteta, expresó que ya existen las reglas y protocolos que indican a un médico cómo actuar en caso de complicaciones.
“Si seguimos al pie de la letra los protocolos y las reglas tal como están, no hay que temer. Además, si tenemos el conocimiento científico sólido, no tenemos por qué temer a ser juzgados”, sostuvo Beteta.
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