Tomado del Diario Al Día
San José, Costa Rica
El cuerpo partido en dos, encontrado el miércoles dentro de una maleta en un quebrada, era el de un “burro” (traficante de droga), que murió cuando uno de los óvulos de heroína que llevaba en su estómago estalló, afirmaron ayer las autoridades costarricenses.
Jorge Rojas Vargas, director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), señaló que los narcotraficantes no estaban dispuestos a tolerar la pérdida de la droga, por lo que decidieron abrir el cuerpo del hombre y extraer los óvulos, tras partirlo en dos partes con un cuchillo largo de carnicero, que apareció el mismo miércoles envuelto en un edredón.
Rojas confirmó que existe un vínculo entre esta muerte y la de otro hombre, ocurrida el 9 de mayo en el barrio México, de San José, a quien también se le estalló uno de los 30 óvulos de heroína que estaban dentro de su estómago.
Confirmó que tras efectuar la autopsia, el cadáver localizado en una quebrada de Tibás de Copey aún conservaba cinco óvulos de heroína que los homicidas no pudieron extraer, los cuales tenían el mismo tipo de envoltorio que los que portaba la víctima del barrio México. La investigación se centra ahora, según Rojas, en saber dónde están falleciendo las personas, ya que no los están matando donde aparecen los cuerpos.
TENÍA CORTES ABRUPTOS
La autopsia reveló que el último cuerpo presentaba un corte irregular en la cintura, el que, al parecer, efectuaron para poder colocarlo en las bolsas y posteriormente en la valija.
“Debió de tener unos 30 óvulos como el otro cuerpo. Los cinco que se hallaron no iban en la cavidad abdominal ya que estaban en el proceso de expulsión y no los pudieron sacar”, afirmó Rojas.
Se investiga también si la víctima habría sido asfixiada y luego cortada, señaló una fuente ligada al caso.
El OIJ presume que el hombre podría ser un extranjero, quien tenía nueve tatuajes, de unos 25 años, de tez morena, de contextura delgada y que posee una estatura de 1,70 metros.
Las autoridades sospechan que se trata de una red internacional que se dedica al reclutamiento de personas para enviarlas con heroína a Europa.
TATUAJES CON NOMBRES
En la parte superior de la espalda, la víctima tenía grabado un tatuaje con el nombre de Angie Guadalupe, en el brazo izquierdo un 17 en números romanos y en la pantorrilla derecha un dibujo de un payaso con sombrero, que tenía grabado el nombre de Reyna. También tenía un tatuaje en forma de dragón en el hombro derecho.
Cerca de la ingle aparecieron grabadas estrellas, tatuajes tribales y en un muslo el nombre de Allison.
Con dichas descripciones el OIJ trata de esclarecer la identidad de la víctima y solicita ayuda de la ciudadanía, por si conocen de quien se trata.
Por el tipo de tatuaje, no se les liga con ningún grupo o pandilla centroamericana.
De momento, no hay ningún reporte de persona desaparecida que tenga las características.
El hecho de que nadie haya reclamado aún los cuerpos, hace presumir al OIJ que se trata de extranjeros contratados para cargar heroína en óvulos.