Un día después del terremoto de magnitud 6.4 Richter, que afectó a la República de China Taiwán el 4 de marzo pasado, las autoridades del país asiático conocían con bastante precisión los daños ocasionados. El secreto: un satélite conocido como Formosat, con capacidad para tomar dos fotografías con alta definición de un mismo lugar.
Tras probar con éxito esta tecnología en Nicaragua, la República de China Taiwán pretende extenderla al resto de países centroamericanos, con el objetivo de que también puedan reconocer los cambios en su geografía y tener respuestas, especialmente si se trata de desastres.
El Embajador taiwanés en Managua, Chin-mu Wu, destacó que su país apunta hacia la cooperación técnica a nivel de desarrollo tecnológico y que, en este sentido, Nicaragua es el primer país beneficiado con este sistema de “vigilancia” geográfica.
Lo que hace el Formosat es enviar imágenes periódicamente desde un ángulo en el espacio, distinto al de otros satélites. Esto lo hace ser más preciso, especialmente porque logra evitar algunas nubes que obstruyen la visibilidad.
Alejandro Rodríguez, director del Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter), dijo que Nicaragua recibe las imágenes cada dos meses, pero puede tenerlas antes si el caso amerita.
El embajador taiwanés afirmó que Nicaragua ya lo ameritó este año, cuando le dieron seguimiento a un incendio en el volcán Masaya.
“OJOS” SOBRE EL CONCEPCIÓN
Rodríguez mencionó que también están siguiendo con esta tecnología un deslizamiento de tierra en el volcán Concepción, Isla de Ometepe, Rivas.
Lo que ambas versiones demuestran es que esta tecnología tiene distintas aplicaciones, tal como lo aseguró el director del Ineter.
Jaime Morales Carazo, Vicepresidente de la República, se inclinó por la ayuda que este sistema tendrá ante un desastre, por ejemplo un terremoto, igual como ocurrió en Taiwán.
Morales Carazo insistió en que las imágenes del Formosat pueden dar una idea de cómo está Nicaragua, para así mitigar los impactos de desastres relacionados con la naturaleza, y luego cómo atender los posibles desastres cuando ocurran.
Entre tanto Rodríguez anunció que, con esta tecnología, incluso se podrá realizar un estudio científico en Nicaragua, que consistirá en medir la humedad del suelo, lo que serviría como una herramienta clave a los agricultores y la seguridad alimentaria.
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