Al momento de darse un cambio democrático, los legítimos dueños de las propiedades que están siendo confiscadas las reclamarán. Lo más probable es que se repita lo vivido en los años 80 y 90
Las nuevas confiscaciones y las inversiones que la dictadura realiza generarán una inmensa deuda pública
Prolongan proceso para unidad liberal
Extraoficialmente se menciona que ya existen acuerdos entre Arnoldo Alemán y Eduardo Montealegre, pero éstos se limitaron a decir por separado que las negociaciones se mantienen, en aras de lograr la unidad liberal, y que no existe nada concreto.
División de orteguistas se calienta en Siuna
La crisis interna que vive el Frente Sandinista (FSLN) en sus estructuras partidarias, por las decisiones de la dirigencia de quitar y poner gente en algunas alcaldías del país, se extendió ayer a Siuna, en la Región Autónoma Atlántico Norte, donde fue nombrado de dedo un secretario político municipal.
Líderes políticos y cívicos se culpan de la apatía social
Mientras avanza la campaña electoral adelantada en busca de la reelección del presidente Daniel Ortega, líderes de partidos políticos y de organizaciones de la sociedad civil se culpan entre sí por la apatía de la sociedad nicaragüense ante los abusos del mandatario.
MVE fortalece sus estructuras
Aunque las negociaciones por la unidad liberal aún no dan frutos, el Movimiento Vamos con Eduardo (MVE) continúa fortaleciendo sus directivas municipales en todo el país, con el objetivo de estar preparado para las elecciones primarias interpartidarias y las presidenciales del 2011.
CSE reprime utilizando la cédula
Expertos en procesos electorales afirman que la negación de la cédula de identidad a Eduardo Enríquez, jefe de redacción de LA PRENSA, es uno de los miles de casos de represión en Nicaragua por razones políticas.
Ofertas de “cañonazos” en US$500 mil
Ofrecimientos que no se limitan a grandes sumas de dinero, a través de diputados disidentes del Partido Liberal Constitucionalista (PLC), es la denuncia que realizó el liberal Víctor Duarte, como parte de la estrategia del gobernante FSLN para mantener el quórum en la Asamblea Nacional y alcanzar los deseados 56 votos que permitirían no sólo la elección de funcionarios públicos, sino las reformas constitucionales que avalen la reelección del presidente Daniel Ortega.