Expertos en procesos electorales afirman que la negación de la cédula de identidad a Eduardo Enríquez, jefe de redacción de LA PRENSA, es uno de los miles de casos de represión en Nicaragua por razones políticas.
El trámite de reposición de cédula Enríquez lo inició el 15 de julio de 2009, después que el 22 de septiembre de 2008 le robaran todas sus pertenencias al ser asaltado frente a su casa. Después que Enríquez hizo el trámite, le dijeron que dentro de 10 ó 15 días hábiles volviera para retirar su cédula, sin embargo hasta hoy no se la han entregado.
Roberto Courtney, director ejecutivo de Ética y Transparencia (EyT), dijo que el desastre que hay en el Consejo Supremo Electoral (CSE) de Nicaragua va más allá de que el registro ciudadano y de cedulación sea manipulado como arma política.
“El tribunal electoral también ha entregado cédulas a menores con propósitos de prostitución, entrega cédulas a narcotraficantes para facilitar sus ilícitos y comete fraude electoral de una forma descarada… Habría que añadirle esos elementos para tener una verdadera dimensión del problema en Nicaragua, porque no es que se le niega la cédula a una persona por razones políticas, sino que se le niega a muchas personas por razones políticas, aparte de la ineficiencia e incapacidad también relacionada con la política”, dijo Courtney.
Mauricio Zúñiga, director ejecutivo del Instituto para el Desarrollo y la Democracia (Ipade), coincide con Courtney al afirmar que en Nicaragua son miles de casos que están en igual situación que Enríquez, ya que la manipulación partidaria se ha expresado desde las elecciones de 1996.
“Al cedular de forma preferente a ciudadanos que son de determinada afiliación política y el no cedular o priorizar al resto de ciudadanos, esto establece ciudadanos de primera y segunda categoría en una flagrante violación a la Constitución Política, a los derechos civiles y derechos humanos”, dijo Zúñiga.
Courtney advirtió que el caso de Eduardo Enríquez es paradigmático por lo conocido, pero éste es un problema que se da con mucha frecuencia. “A nivel municipal está sucediendo el caso de Eduardo Enríquez por centenares de personas; es decir, si llega por la vía del partido hay cédula, si quiere llegar por cualquier otra vía hay un buen número de personas que no logra tener su cédula”.
Courtney advirtió que estamos ante un tribunal electoral colapsado, incapaz de llevar a buen término ninguna elección en el futuro.
Zúñiga dijo que las autoridades del CSE deben tomar conciencia de lo grave que son las deficiencias técnicas, previo a un proceso electoral nacional si fuera el caso. Sin embargo, “lo más grave es que estamos en presencia de una manipulación política de un derecho ciudadano, que es sagrado, como es el derecho a una identidad”.
LA SOLUCIÓN ES CAMBIAR A LOS MAGISTRADOS
El director de EyT, Roberto Courtney, dijo que lo que hay que hacer es aprovechar el hecho de que esté expirando el período de los magistrados para reemplazarlos, y como segundo paso restaurar la capacidad operativa del CSE, a partir de que las nuevas autoridades ejerzan una cadena de mando orientada a obedecer el mandato de la institución.
Zúñiga hizo un llamado a la responsabilidad de las autoridades, tanto del gobernante Frente Sandinista (FSLN) como del Partido Liberal Constitucionalista (PLC), “que son las que dominan las instituciones del Estado y son las que han llevado al país a un estado de partidarización, para que superen este problema de diseño institucional que tiene atrapada a la mayoría de los ciudadanos en una especie de indefensión”.
NUNCA RESPONDIERON
A pesar que Enríquez pagó por la reposición de su cédula desde el 15 de julio del año pasado y que durante más de 10 veces visitó las oficinas del CSE en el Zumen, los funcionarios nunca le dieron una respuesta clara sobre por qué no la entregaban. Tampoco lo hicieron el director nacional de Cedulación, Sergio Rayo, ni el director de Informática, Wilhem Schmidt, a quienes escribió sendas cartas que jamás contestaron y cuando logró localizarlos por teléfono ninguno tuvo una respuesta sobre el caso.
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