Aunque Nicaragua tiene altas posibilidades de alcanzar el primero de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) para el 2015 —que busca reducir a la mitad la pobreza extrema y el hambre— el país presenta serios problemas en el avance por la reducción de la mortalidad infantil.
Esto lo explicaron expertos del Banco Mundial, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), que participaron en un diálogo en el que discutieron los avances de la región ante el cumplimiento de los ODM.
Juan Carlos Moreno, representante de la Cepal, indicó en su presentación que la región está encaminada hacia la reducción en dos terceras partes de la mortalidad de la niñez; sin embargo hay numerosos países que probablemente no la alcanzarán, como podría ser el caso de Nicaragua.
Cuando faltan cinco años para vencerse el plazo para alcanzar los objetivos, el progreso regional en este tema fue de 79 por ciento; sin embargo de los 36 países de América Latina, Nicaragua presenta un rezago aproximado de 24 por ciento con relación al promedio regional, que fue medido de 1990 al 2009, lo que ubica al país en el primer lugar en tasa de mortalidad infantil.
Pero el problema no es necesariamente falta de disponibilidad de los países; pues la crisis económica mundial que se reportó en 2009, ha bajado las probabilidades de que algunos países avancen en el proceso por alcanzar estos objetivos.
Al menos eso considera Natalia García, representante del PNUD en Guatemala, quien asegura que la crisis ejerce presión sobre los gobiernos y los obliga muchas veces a desviar recursos de los programas sociales a otras políticas de rescate y estabilización de la economía.
PROBABILIDADES A LA BAJA
El Banco Mundial realizó un balance de las probabilidades de los países centroamericanos de alcanzar las metas antes y después de la crisis. En temas de disminución de la pobreza extrema, Nicaragua marcha sobre rieles.
Sin embargo, antes de la crisis Nicaragua ya estaba en números rojos en lo que respecta a la reducción de la mortalidad infantil y la universalización de la educación primaria, pero tenía probabilidades de alcanzar la meta. Después de la crisis, es bastante improbable que se alcancen y en iguales condiciones se encuentra Guatemala y Honduras.
El tercer ODM busca una igualdad entre los géneros y la autonomía de la mujer; por eso García asegura que es de suma importancia incorporar el enfoque de género en estos temas “porque se ha hecho evidente que las mujeres se han visto profundamente afectadas”.
Aunque destacó que en países como Nicaragua sí ha habido un incremento en la relación hombre-mujer en el acceso a la educación; el tema de la discriminación está latente en los puestos de trabajo; en que los salarios de las mujeres son menores que los que obtienen los hombres y también está la discriminación para acceder a puestos directivos; además del maltrato psicológico y el acoso sexual.
También destacó que las mujeres que viven en las áreas rurales se encuentran en peores condiciones y esto se ve agudizado por la violencia y la feminización de la epidemia del VIH.
A nivel general, también se enumeraron como enemigos de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, el tema de la violencia, el crimen organizado, los desastres naturales y el alza en los precios de los alimentos.
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