MÉXICO
Muere importante capo
El ministerio de Defensa de México confirmó ayer la muerte de Ignacio “Nacho” Coronel, uno de los máximos capos del cártel del Sinaloa, en un enfrentamiento con el Ejército mexicano en el estado de Jalisco, oeste de México.
El Ejército realizó un operativo para detener a Coronel, quien “intentó evadir la acción” abriendo fuego contra los militares, que repelieron la agresión “falleciendo el referido capo”, informó Edgar Ruiz, subjefe del Estado Mayor de la Defensa mexicana.
De acuerdo con el FBI, Ignacio Coronel era líder de una de las organizaciones más poderosas del tráfico de drogas de México, con “alcance de influencia y operaciones” en Estados Unidos, y países europeos, centroamericanos y suramericanos.
EFE
ESTADOS UNIDOS
Otra marea negra
Cerca de cuatro millones de litros de petróleo se derramaron en un río del estado de Michigan (norte de Estados Unidos), tras la ruptura de un oleoducto, informaron autoridades.
La agencia de protección del medioambiente de Estados Unidos (EPA) indicó el miércoles que la fuga había comenzado el lunes cuando un oleoducto de 76 centímetros de diámetro, perteneciente a la empresa canadiense Enbridge Inc, se quebró derramando el crudo en el arroyo Talmadge.
Según la empresa, el oleoducto fue cerrado al igual que las válvulas de aislamiento, deteniendo así el vertido de petróleo.
AFP
VENEZUELA
Toman finca de Zuloaga
La militarizada Guardia Nacional de Venezuela tomó ayer una finca propiedad de Guillermo Zuloaga, quien es presidente de la crítica televisora privada Globovisión y está enjuiciado por “usura”, informó Perla Jaimes, una de las abogadas de ese canal.
Según Jaimes, la medida “forma parte de otra arremetida contra el presidente de Globovisión y forma parte de las acciones legales que se han abierto” contra Zuloaga, quien está fuera del país.
El directivo, de 67 años, es acusado de “usura” por la justicia venezolana y asegura que es víctima de una persecución por parte del gobierno de Hugo Chávez, quien rechaza las críticas.
AFP
COLOMBIA
Uribe molesto
El mandatario colombiano, Álvaro Uribe, informó ayer que algunos magistrados de la Corte Suprema están acabando con la justicia al “suplantarla por odios” y señaló que su hijo Tomás acudirá a la Fiscalía, que lo investiga por supuestamente ofrecer prebendas para la reelección presidencial de su padre en 2006.
Ésta es un perla más del largo rosario de desencuentros entre Uribe y el magistrado de la Corte Suprema de Justicia, Yesid Ramírez, quien le pidió a la Fiscalía investigar al hijo de Uribe porque supuestamente tuvo injerencia en el nombramiento de dos notarios.
Según Uribe, con la petición de la Corte Suprema a la Fiscalía para que investigue a su hijo Tomás, se están “atendiendo infamias y dando lugar a tramitar rencores a través de la justicia”.
EFE
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