CORRESPONSAL/JINOTEGA
La Asociación para la Cooperación y el Desarrollo de la Fisioterapia Iximelagua, ONG vasca, está cooperando con los capítulos de Los Pipitos de Jinotega y Matagalpa, con una inyección de 24 mil euros, confirmó Naiara Navarro, representante en el país.
“Venimos de San Sebastián, allá en el país vasco, España y luego de hacer un estudio y saber que niños discapacitados no tenían atención decidimos tres chicas españolas impulsar un proyecto de atención en fisioterapia a Los Pipitos de ambos departamentos”, aseguró Navarro.
Además de ella, Lucía Manso y Amaia Goycochea, son las tres pediatras fisioterapeutas que apoyarán esta causa.
“Y como en nuestro país trabajamos con niños decidimos buscar a finales del 2009 financiamiento para un proyecto de este tipo aportando los fondos las alcaldías de Sarao, Zabaleta, más entidades privadas que además aportan yesos, sillas de ruedas, férulas, lo mismo que para pagar una coordinadora del proyecto, fisioterapeutas, alquilar un local, la compra de una camioneta para movilizarse de un lado para otro y así estamos trabajando”, refirió.
Ana Espinosa, fisioterapeuta nicaragüense, explicó que tienen como beneficiarios, por el momento, 36 niños de La Dalia e igual cantidad en San Ramón y Jinotega “pero como somos un proyecto nuevo, iremos expandiéndonos hacia otros municipios de ambos departamentos”.
UN PROCESO DE APRENDIZAJE
Reina Álvarez es voluntaria en Matagalpa del Capítulo Los Pipitos y manifestó: “Estamos aprendiendo a hacer moldes de yesos para que los niños se puedan poner de pie y movilizarse de alguna manera sin necesidad de una silla de ruedas”.
Elizabeth Ortega es la mamá del niño Nelson Omar Llorente, quien fue operado de un tumor en la columna y a sus tres años no camina. “Con esta técnica a base de yeso me dijeron que el niño se podrá poner de pie, lo cual será un gran avance, puesto que solo chineado, sentado y acostado lo mantengo”, dijo.
Doña Cándida Rosa Morazán es voluntaria de Los Pipitos en San Ramón, Matagalpa, y refirió que “las cooperantes españolas vinieron hace algunos meses y se llevaron la inquietud de ayudar a los niños de Nicaragua, lo cual ahora se hace una realidad y con estos moldes de yeso se ha visto el cambio de los niños, nos coordinamos con el Silais y vamos a extendernos al municipio de Rancho Grande, en Matagalpa y en Jinotega estamos iniciando”.
Ver en la versión impresa las páginas: 7 B