Autoridades del Ministerio de Energía y Minas (MEM) confirmaron que finalmente la empresa de capital privado Eolo de Nicaragua S.A. logró firmar con la empresa distribuidora Gas Natural los contratos de compraventa de la energía que comercializarán en el país.
Eolo de Nicaragua instalará el que sería el tercer parque eólico del país. Es una empresa de socios mexicanos, que aparentemente se abrió mercado en el país por los fuertes “lazos de amistad” que tienen sus socios con el presidente Daniel Ortega y su hermano Humberto.
Estos contratos de compraventa de energía establecen que el precio base de cada megavatio producido quedó fijado en 104.5 dólares con un ajuste anual del tres por ciento.
El ministro de Energía y Minas, Emilio Rappaccioli, dio a conocer recientemente la firma de los contratos con Eolo y señaló que esta era una “buena noticia” para el país, porque queda abierto el camino para que se inicie la construcción de otro proyecto que producirá energía renovable y barata en Nicaragua, que incidirá en el anhelado cambio de la matriz energética, que actualmente depende de los derivados del petróleo.
Rappaccioli dijo que las negociaciones con los directivos de Gas Natural y Eolo se realizaron durante la semana pasada y que se acordaron contratos de compraventa que son “favorables” para el mercado eléctrico nacional.
El funcionario no detalló los aspectos técnicos de los contratos de compraventa, pero aseguró que mantienen los mismos parámetros que tienen los que se firmaron con la empresa Blue Power & Energy, que también producirá energía a base de viento.
“Después de varios meses de negociaciones los directivos de Eolo y Gas Natural llegaron a acuerdos, según me informaron y esperamos que esta semana firmen oficialmente. Las condiciones de los contratos son las mismas en que se firmaron con Blue Power y una vez que estén listos tendrán que ser analizados para darles el visto bueno y será el Instituto Nicaragüense de Energía el que dará su ratificación final”, explicó.
“El costo por megavatio producido, al igual que con Blue Power se fijó en 104.5 dólares, un precio aceptable”, agregó Rappaccioli.
La empresa Eolo, S.A. tiene una licencia para generar 40 megavatios en total y su período de vigencia es por 30 años.
El parque eólico estará ubicado en departamento de Rivas, cercano a los dos proyectos del consorcio Amayo y de la empresa Blue Power, en la finca San Carlos, que tiene terrenos en ambos lados de la Carretera Panamericana Sur, a la altura del kilómetro 123, donde se estarán instalando 25 aerogeneradores con capacidad 1.5 megavatios de la marca General Electric.
“Esperamos que en los próximos dos años entren a operar estos proyectos eólicos que incluye otro que ejecutará también la empresa Albanisa (Albaeolo de 40 megavatios) más los 39.6 de Blue Power sumarán al menos 100 megavatios producidos con viento, energía renovable que será mucho más barata que la producida con fuel oil. Esto va a ser un tremendo cambio en nuestro sistema de generación y producirá ahorros de 20 millones de dólares, según los cálculos proyectados por el Ministerio de Energía”, indicó.
Según el Centro Nacional de Despacho de Carga el precio promedio de generación ayer estaba entre los 177.1 y los 202.1 dólares por megavatio producido en una matriz combinada con plantas térmicas y de producción renovable.
“Si tomamos el precio del barril de fuel oil que es de 96 dólares actualmente y el rendimiento promedio de las plantas térmicas que anda por el orden de los 16 kilovatios horas por galón, con los proyectos eólicos se estiman ahorros de 20 millones de dólares anuales, aspecto muy significativo para el país”, dijo el funcionario.
La empresa Eolo S.A. es representada por inversionistas mexicanos; el presidente de su junta directiva es el mexicano William Fritz Jacobson Cavazos y su secretario general es el doctor Pedro Pablo Cabezas Elizondo, quien realizó todos los trámites legales que permitieron la adjudicación de la licencia de generación a esta empresa.
La instalación de Eolo S.A. en Nicaragua generó fuertes críticas al Gobierno, porque el MEM obligó al consorcio canadiense Amayo S.A. a negociar con los empresarios de Eolo, para que se les permitiera utilizar su subestación eléctrica y así transmitir a través de ella la energía que producirán. Amayo debió ceder, ya que estaba en juego la licencia de generación de Amayo fase II.
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