COLABORACIÓN
El obispo de la Diócesis de Granada, monseñor Jorge Solórzano, criticó a las autoridades departamentales y nacionales por no darle solución a los problemas de infraestructura y comunicación que viven los habitantes de las diferentes comunidades de Malacatoya.
El obispo Solórzano señaló que con las lluvias ya no hay caminos para llegar a poblados. “Nosotros que visitamos la zona tenemos que ir en lancha porque la barcaza que había se dañó y ahora la gente está incomunicada y eso no es humano, urge darle una respuesta a esta población”, explicó el religioso.
“Yo veo cómo llegan dos arroceros a explotar a la pobre gente de la zona con salarios bajísimos para cortar el arroz, lo peor es que se llevan las ganancias para otro lado y nada dejan en la zona en detrimento de la gran mayoría que es gente pobre con grandes necesidades”, expresó el alto jerarca católico.
SOLO LLEGAN A EXPLOTAR A LA GENTE POBRE
Monseñor Solórzano explicó que hay grandes extensiones de arroz, pero son de dos personas que llegan a llevarse el producto de la zona y “le pagan un salario simbólico a los campesinos, la verdad es que se aprovechan de la necesidad de las personas”, agregó.
“Yo creo que esto daña la dignidad de la persona humana y eso es pecado, ante los ojos de Dios; hay que buscar una respuesta urgente porque la gente se muere, ya que no puede salir de la zona para buscar un hospital y estamos hablando de la zona cercana a Granada”, dijo el prelado.
Cabe señalar que Malacatoya está formada por más de 12 mil habitantes, que en su mayoría tienen problemas de nutrición, empleos, educación, medicinas, agua potable, vías de acceso a las comunidades, a pesar de estar a solamente a 27 kilómetros de Granada.
Solórzano hizo un llamado al Gobierno central, autoridades municipales y a los empresarios de la zona a que busquen cómo darle solución a este problema de Malacatoya, que viven en pobreza por falta de atención a esta zona. Los pobladores de Malacatoya esperan ayuda.
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