El subsidio del 41.8 por ciento a la tarifa de la energía eléctrica prácticamente congela el precio de la luz a los hogares nicaragüenses, ya que no podrá subir ni bajar, por un tiempo indefinido.
Esto se desprende de la explicación que dio a LA PRENSA el gerente de país de la empresa AEI Energy, César Zamora, tras analizar las controversias que propició el anuncio presidencial.
Según Zamora, esta medida pone “un techo” a la tarifa, porque no podrá subir aunque se eleven los precios internacionales del petróleo, pero tampoco bajarán, porque el excedente en las facturas cubrirá la deuda asumida con Alba Caruna, por el financiamiento del 41.8 por ciento de déficit en el pago.
Asimismo, el gerente de país de AEI Energy dijo que el alza en la energía se justifica en el aumento de los precios del búnker.
Zamora presentó una tabla de precios oficiales del búnker, que indica que el 1 de enero de 2009 estaba en 37 dólares el barril de búnker, luego se mantuvo en el rango de los 70 dólares durante seis meses de 2010, y se elevó hasta los 100 dólares en junio del presente año.
El búnker es la principal fuente de energía del país, ya que casi el 80 por ciento de la energía de Nicaragua se produce a base de este combustible.
“Hay que aclarar que el incremento en los precios del combustible ha afectado la tarifa en Nicaragua, y que se anunció un subsidio que va a costar este año entre 107 millones de dólares y 120 millones de dólares al país”, expresó Zamora.
Para cubrir esta cantidad de dinero la tarifa necesitaba un aumento de un 41 por ciento, pero el impacto de esta alza no lo sentirán los consumidores porque fue asumido por el Estado en calidad de préstamo.
Las preguntas de quién va a pagar este préstamo y cómo se ejecutará el pago, Zamora las respondió así:
“Lo va a pagar la misma tarifa. ¿Cómo? La condición para este pago es que (el mismo) se hará efectivo cuando el precio del búnker baje o la energía renovable entre, lo que debe bajar el precio promedio de compra (de energía)”.
“Entonces, se va a pagar, no bajando (la tarifa) cuando baje el precio de la energía, sino que se va a poner un techo”, añadió.
En otras palabras, cuando el precio del petróleo baje, o cuando aumente la generación de energía renovable (más barata), los consumidores no verán reflejados esos “ahorros” en sus facturas, sino que la diferencia será destinada para abonar el préstamo que impidió que pagaran el 41.8 por ciento de aumento.
Zamora insistió en que, por otra parte, no podrá haber otra alza en la tarifa de la energía después de las elecciones presidenciales, independientemente del candidato que gane, porque el método deja claro que cualquier crecimiento en la tarifa será financiado por el mismo préstamo.
Zamora vio con buenos ojos esta medida, porque soluciona el “hueco” de 107 millones de dólares que tenía el sector energético del país a causa del incremento en los precios del búnker.
50 MILLONES DE GAS NATURAL EN EL AIRE
Sin embargo, aclaró que todavía está por resolverse el otro gran problema del sector: los 50 millones en pérdidas que la distribuidora Gas Natural prevé para 2011 en Nicaragua.
El Gobierno de Nicaragua mantiene diálogos secretos con la distribuidora de energía Gas Natural, para encontrar una solución a esa pérdida.
Ayer LA PRENSA informó de la visita el lunes del consejero delegado de Gas Natural, Rafael Villaseca, máxima autoridad de la empresa, que se reunió con el presidente Daniel Ortega, pero los resultados de la reunión se mantienen en secreto.
Ayer no contestaron llamadas el director del INE, David Castillo, ni el ministro de Energía, Emilio Rappaccioli, que se reunieron con Villaseca.
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