El atentado que acabó con la vida del cantante argentino Facundo Cabral y en el que salió herido el nicaragüense Henry Aquiles Fariñas Fonseca, en Guatemala, evidenció que existe mucha fragilidad política en el Sistema de Integración Centroamericana, opinó ayer Roberto Orozco, investigador del Instituto de Estudios Estratégicos y Políticas Públicas (IEEPP).
Orozco dijo que lo más recomendable es que el caso se siga investigando hasta llegar al fondo del asunto, porque esto puede ser un detonante de criminalidad en la región.
El investigador agregó que es necesario castigar a los culpables y que los políticos de cada nación dejen de estar “culpando” a cada país de lo sucedido.
- Francisco Aguirre Sacasa, excanciller de la República, dijo ayer que este caso no debe ser politizado en ningún momento y más bien las autoridades de los países involucrados deben colaborar entre sí para aclarar las circunstancias del crimen.
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“Lo que se debe hacer es seguir con las investigaciones del caso para castigar a los culpables intelectuales y materiales del caso, porque las declaraciones que están haciendo representantes de Gobierno de cada país no están ayudando en nada y más bien están originando niveles de desconfianza que no son recomendables”, señaló.
El caso ha llevado a las autoridades de las fuerzas de seguridad de toda la región a mantenerse en constante comunicación.
Uno de los sospechosos, Alejandro alias “El Palidejo”, está plenamente identificado, no es nicaragüense, pero sí estuvo en Nicaragua y se mueve por todo el istmo, dijo ayer la primera comisionada y jefa de la Policía Nacional, Aminta Granera.
DECLARACIONES VAN Y VIENEN
Aunque inicialmente, las autoridades guatemaltecas lo habían identificado como nicaragüense, Granera dijo que no lo era, pero el mismo presidente guatemalteco Álvaro Colom aseguró que el ataque contra Cabrales y Fariñas fue ordenado desde Nicaragua.
También hubo algunas aseveraciones periodísticas no confirmadas en el transcurso de la semana, que referían que la orden pudo haber llegado desde Costa Rica.
UNIDOS A PESAR DE TODO
Orozco dijo que la actuación del crimen organizado está cada vez más fuerte en los países centroamericanos. En ese sentido, consideró que deben estar plenamente unidos para tratar de impulsar políticas de seguridad orientadas a combatir el narcotráfico.
“Centroamérica debería estar unida a pesar de que los presuntos hechores sean de un país o de otro. Creo que cada país está en la obligación de revelar los nombres de los autores de este tipo de casos, independientemente de los vínculos políticos y económicos que tengan”, dijo.
“Con estos casos tan tristes la que pierde es la región y lo que debería estar haciendo es investigar el caso y la figura del señor Fariñas para llegar al fondo del asunto”, insistió Orozco.
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