Secretismo, control total de los Consejos del Poder Ciudadano (CPC), intimidación policial, escasa afluencia ciudadana y sin ningún documento que soporte que el ciudadano fue verificado o que hizo cambio de domicilio, arrancó ayer la jornada de verificación en 138 municipios del país.
Harry Chávez, del Instituto para el Desarrollo de la Democracia (Ipade), dijo que en muchos centros de verificación reinó una actitud de no dejar que los observadores se acercaran al centro. “Hay una actitud de amenaza, nos han sacado de varios centros. Hay un hermetismo”, indicó Chávez.
En Chinandega, Anabel Romero, candidata a diputada y representante legal del departamento por la Alianza Liberal Nicaragüense (ALN), fue detenida ayer por la tarde supuestamente por andar cedulando y obstruyendo el proceso de verificación.
Celso Canelo, vocero de ALN dijo que el trabajo que la candidata a diputada andaba haciendo era de supervisión del proceso.
“Aquí yo soy la autoridad y no podes hacer foto”, le dijo una mujer policía a Cristiane Lugo Cuadra, miembro de Hagamos Democracia, en un centro de verificación del Distrito Tres de Managua.
Lugo Cuadra realizó un recorrido por diversos centros de verificación para observar el proceso y señala que la mujer policía la amenazó con llevarla presa si se atrevía a tomar una foto, luego la sacó del centro. Algo similar le ocurrió en un centro de Los Robles donde no le permitieron hacer fotos y luego un grupo de CPC la intimidaron y la siguieron por la ciudad durante varios minutos en una moto.
Moisés Pacelli, coordinador departamental del Ipade en León, dijo que mientras observaban el proceso de verificación en ochos municipios del departamento, fueron intimidados por la Policía y jóvenes miembros de la Juventud Sandinista, quienes portaban camisas distintivas del partido.
[/doap_box]
“Se estaban monitoreando 28 centros de verificación, lamentablemente unos motorizados llegaban donde nuestros observadores y eran intimidados”, manifestó Pacelli.
“En los lugares en donde la policía ha amenazado ha sido porque los miembros del centro se lo han pedido a la policía”, dijo Harry Chávez, quien agregó que “hay gente que anda organizada para eso, hay brigadas que anda cuidando los centros de verificación”.
En el centro de verificación Flor de Pino del barrio Memorial Sandino, una observadora de Ipade, quien estaba en la calle porque le impidieron entrar al centro, fue advertida por un policía de que no podía estar ahí, porque las muchachas (miembros de los CPC) decían que era prohibido. Sin embargo la joven se mantuvo en su lugar, alegando que estaba en la calle y es pública.
Chávez dice que llama la atención que una simple actividad administrativa, como dijo Roberto Rivas, se esté dando bajo tanto secretismo.
TÉCNICOS DEL CSE CON DOBLE RASERO
En cada uno de los centros de verificación habían grupos de la Juventud Sandinista, los CPC y los Consejos de Liderazgo Sandinista (CLS), quienes padrón en mano conducían a los ciudadanos hacia la mesa donde debían verificarse.
El magistrado de facto dijo en días pasados que en cada centro de verificación solo habría dos miembros de mesa, un coordinador de centro y un edecán.
Ramón Román, habitante del barrio Enrique Smith, dijo que desde el miércoles miembros de los CPC andan casa a casa verificando y hacen firmar a las personas.
Esos mismo grupos de los CPC y la Juventud Sandinista prácticamente impedían el derecho a la opinión de la ciudadanía, haciendo señas para que no hablara o simplemente escuchando lo que decían, por lo que las personas preferían no hablar.
Incluso en el colegio Primero de Mayo, cuando Víctor Manuel Yeskas, quien andaba en total estado de ebriedad, le mostró a LA PRENSA una invitación personalizada que el Frente Sandinista le hizo para que fuera a verificarse, el coordinador de centro se acercó y dijo que “es enfermito”.
Ricardo Obando jefe de campaña de la Alianza PLI en los Distrito Cinco y Seis de Managua, dijo que los militantes del Frente Sandinista están trabajando con doble sombrero, porque son quienes convocan a la ciudadanía a verificarse. son los técnicos de verificación, los coordinadores de centro, los edecanes; en fin, están actuando como funcionarios del CSE.
En el recorrido que LA PRENSA hizo por varios centros de verificación, al menos en dos de ellos se presentó la circunstancia en la que a una media cuadra, en una casa particular, había un grupo de personas con padrones electorales y cuando preguntamos si ahí también era centro de verificación dijeron que no e inmediatamente cerraron la puerta.
(Colaboración de Eddy López, Saúl Martínez, Jerónimo Duarte, Sergio León, Noel Amilcar Gallegos y Félix Rivera).
Ver en la versión impresa las páginas: 5 A ,1 A
