Habían pasado cuatro días desde que M. A. G. S. a quien llamaremos el comandante porque así lo prefiere, no salía de su casa.
Esa mañana del 28 de junio se levantó y aunque no quería hablar de lo sucedido se dirigió a la estación policial de Nagarote.
El comandante, de 58 años, llego a decirles que había sido violado y señaló a dos de sus primos: Rolando y Santiago Gallo Torres.
Hace un mes y 20 días que eso pasó, y desde entonces el comandante no logra conciliar su sueño.
Cuando recuerda se siente mal consigo mismo. “Es como si me estuviera pasando en este momento, no se que voy a hacer, me siento muy mal en mi vida”.
Aún así, la fiscalía no ha puesto ninguna denuncia ante los tribunales y nadie está siendo investigado.
El denunciante acusa a las autoridades del Ministerio Público de León, Freddy Arana y Adriana Gutiérrez de parcializarse a favor de los señalados o, en el peor de los casos, de ineficiencia.
“Lo único que me dijo Arana es que en sus 26 años de experiencia no había visto un solo caso como el mío, como si fuera motivo para no investigar” se lamentó.
FUE PLANIFICADO
El 24 de junio pasado el comandante había llegado a visitar a sus primos y estos, con aproximadamente 12 personas organizaron una fiesta en una casa en la playa en Miramar.
Ahí, según él, le pusieron droga en una cerveza hasta quedar indefenso.
Fue entonces que supuestamente Santiago Gallo Torres y otros que no recuerda en detalle, lo sujetaron de las manos y desvistieron.
Según su testimonio, Rolando Gallo Torres abusó de él.
“Ellos lo tenían preparado, el autor ya lo tenía amarrado para llevarme a Miramar y hacerme esta acción”, señaló.
El comandante cuestionó como Rolando puede estar al frente del colegio Los Amigos en Nagarote, con actos como el que denuncia.
Asegura que su caso lo hace público por sentirse indefenso ante la flexibilidad de las autoridades tanto policiales como del Ministerio Público. Según él, los señalados en la denuncia solo fueron llamados como testigos y no hubo arresto preventivo para nadie.
El examen del médico forense indica que hubo desgarro en la cavidad anal producto de la penetración y graves daños sicológicos.
Intentamos conocer la posición del fiscal Arana, pero no fue posible, ni de forma personal en León, a través de nuestro corresponsal, ni vía telefónica.
El comandante interpuso su queja ante la inspectoría general del Ministerio Público, el pasado 5 de agosto y ante la Policía Nacional el 27 de julio.
Este hombre insiste en que se haga justicia en su caso.
En el país, las denuncias de violaciones aumentaron en el primer semestre del año, según la Policía.
Ver en la versión impresa las páginas: 5 A
