Lucía Navas
Si bien el Ministerio de Hacienda y Crédito Público sostiene que el gasto de inversiones del Estado lleva una “evolución satisfactoria”, lo que está pasando es que en 2011 se repite la tendencia de retrasos en gran parte de los fondos que deberían estar ejecutados.
Globalmente el avance del gasto capital entre enero y septiembre de 2011 tiene un cumplimiento del 65.2 por ciento.
Adelmo Sandino recuerda que los cooperantes no desembolsan los fondos si no hay informes del avance de las obras. También cree que afecta la alta rotación del personal del Estado y la mala administración de las unidades ejecutorias presupuestarias.
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Al compararse con la tendencia en el mismo período del año pasado, que fue del 67.9 por ciento, se concluye que en 2011 no hay variación en el “bajo ritmo de ejecución” que ha marcado durante el actual Gobierno, según análisis del Instituto de Estudios Estratégicos y Políticas Públicas (IEEPP).
Adelmo Sandino, investigador de presupuestos públicos del IEEPP, dice que es preocupante la evolución de este rubro del presupuesto, pues ya debió ejecutarse un 80 por ciento de los fondos.
“Uno de los grandes problemas de los últimos años es que se ha venido reduciendo el gasto de capital y es una tendencia marcada en todo este período de gobierno, y por otro lado, se combina el problema de la subejecución, lo cual preocupa”, dice Sandino.
Con esta base, el IEEPP pone en duda que en el último trimestre del año se logre cumplir con el 100 por ciento de los proyectos y programas públicos que restan.
LOS MENOS EFICIENTES
El Informe de Ejecución Presupuestaria Enero-Septiembre 2011, publicado por Hacienda, refleja que lo asignado en el Programa de Inversión Pública (PIP) se proyecta a 7,565.4 millones de córdobas, monto que incluye la reforma presupuestaria de abril pasado.
Cuando se revisa en detalle el cumplimiento por institución, hay grandes brechas entre unas y otras. El Instituto de la Vivienda, Urbana y Rural (Invur), el Instituto Nicaragüense de Turismo (Intur), el Instituto Nacional Tecnológico (Inatec), el Ministerio de Defensa y el Ministerio de Educación (Mined) son los que menos han cumplido.
Las instituciones antes mencionadas tienen entre cero y 28 por ciento de ejecución de sus presupuestos de inversiones.
Sandino identifica que este año al problema del arrastre de los programas públicas, influyó la campaña electoral, puesto las instituciones públicas pusieron a “ disposición los recursos humanos y no humanos”, a favor del partido gobernante.
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