Los cuentos estimulan la fantasía y la imaginación del niño por lo cual los especialistas recomiendan a los padres leerles desde edades tempranas. Además cuando el niño se acerca a la lectura y se vuelve aficionado a los cuentos tendrá un mayor interés por descifrar lo que dicen los otros libros. De su entusiasmo y placer nacerá su amor por la literatura. Además se establece una buena relación afectiva entre padres, madres e hijos y estimula el desarrollo de su incipiente lenguaje oral. Cabe mencionar que el niño puede leer las imágenes de un cuento y expresar lo que ve, interpretando los distintos elementos de las imágenes, como paso previo a la lectura comprensiva.
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