Por Arnulfo Agüero
“Siempre hablamos del poder como el ejercido del gobierno en sus formas estructuradas, pero el poder se manifiesta también en las relaciones individuales que establecemos sobre otras personas, cuando creamos jerarquías”, afirma Juan Sobalvarro, quien acaba de publicar su libro de cuentos El dueño de la pelota .
“No hablo del poder como institución establecida, sino de la ambición de poder que trae uno desde niño, de dominar a los otros”, subraya.
Pone de ejemplo el cuento que da título a su libro, una narración nutrida de realismo social y expresivo. “Se trata aparentemente de un juego inocente de pelota, pero al final es un niño (Javier) viendo la posibilidad de dominar a los otros por medio de la pelota”.
Se declara fanático del futbol, pero aclara que para este relato su referente no es el deporte de los grandes estadios, sino el de calle, el que los chavalos llaman “perrera”.
Es por esto que la escritura de Sobalvarro a veces se impregna de un humor que sabe a cotidiano, es el mismo que posee el nicaragüense que es capaz de reírse para sobreponerse a situaciones difíciles.
En El dueño de la pelota aparece una colección de microcuentos que constituyen la segunda sección del libro. El autor afirma que su preocupación por la escritura breve proviene de la poesía, del afán de precisión y brevedad que tiene la poesía por norma. Y hace la observación de cómo el microcuento termina conectándose con la llamada poesía epigramática.
Su libro se presenta mañana a las 6:30 p.m. en el Instituto Nicaragüense de Cultura Hispánica (primera entrada de Las Colinas, siete cuadras arriba).
El libro esta disponible en librería Literatos (Colonial Los Robles, Plaza El Sol 4 1/2 al sur, frente a Librería San Jerónimo en Managua).
Ver en la versión impresa las páginas: 6 B