Caracas/EFE
Los presidentes de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de América (ALBA) aprobaron hoy una declaración de condena a lo que consideran “política sistemática de injerencia” en Siria y de apoyo a las iniciativas del Gobierno de Bachar al Asad para superar la crisis.
Los presidentes “reiteraron su condena a la política sistemática de injerencia y desestabilización en la hermana república árabe de Siria, cuyo fin es imponer por la fuerza al pueblo sirio un cambio de régimen”, indica la declaración leída por el presidente venezolano, Hugo Chávez.
El gobernante anfitrión de la XI Cumbre de la ALBA señaló que los países de ese mecanismo “condenan los actos de violencia armada que grupos irregulares apoyados por potencias extranjeras han desatado contra el pueblo sirio y formulan votos por que la sociedad siria retorne a la calma y se desarrolle en un ambiente de paz”.
Además, “reiteran su apoyo a la política de reformas y dialogo nacional impulsadas por el Gobierno del presidente Bachar al Asad que buscan encontrar una solución política a la crisis actual, respetuoso de la soberanía del pueblo sirio y de la integridad territorial de ese hermano país árabe”.
El presidente venezolano consideró ayer “muy positivo” el veto de Rusia y China en el Consejo de Seguridad de la ONU que evitó adoptar una resolución sobre la situación de violencia que vive ese país árabe, ante la violenta represión que el régimen sirio ejerce contra su población desde hace once meses.
La ALBA es un mecanismo de integración impulsado por Venezuela y Cuba desde 2004 al que pertenecen, además, Bolivia, Ecuador, Nicaragua, San Vicente y las Granadinas, Dominica, y Antigua y Barbuda.
