Ginebra/EFE
El relator especial de la Organización de Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas, James Anaya, instó hoy al Gobierno de Panamá y a los pueblos indígenas del país a iniciar un proceso de diálogo para terminar con la tensión y la violencia.
En un comunicado, Anaya solicitó al Ejecutivo panameño y a los pueblos indígenas Ngbe-Buglé, Emberá y Wounaan que entablen “con la mayor brevedad” un proceso de diálogo que conduzca a una solución pacífica de la conflictividad.
La semana pasada indígenas panameños del pueblo Ngbe-Buglé protagonizaron una protesta contra las actividades mineras e hidroeléctricas propuestas para sus territorios, que consistió en el bloqueo durante seis días de la vía que comunica el país con el resto de Centroamérica.
Los enfrentamientos entre indígenas y fuerzas policiales culminaron el pasado día 5 con al menos un manifestante muerto, 41 detenidos y 39 heridos.
Miembros de Emberá y Wounaan, entre otros pueblos indígenas, hicieron un llamamiento público en el que denunciaban la falta de legalización de sus tierras y anunciaban movilizaciones de protesta para expresar su solidaridad con Ngbe-Buglé.
En este sentido, el relator especial instó al Gobierno de Panamá a que adopte “las medidas necesarias” para garantizar la seguridad de las personas que participen en las manifestaciones y evitar actos que afecten la vida e integridad de las mismas, al tiempo que reclamó una investigación sobre las circunstancias de la muerte del indígena.