Martha Vásquez
El vicepresidente de la Corte Suprema de Justicia, magistrado Marvin Aguilar, dijo que la realización de las audiencias de apelación sin la presencia del fiscal, siempre que este haya expresado sus agravios con anterioridad, es una vieja práctica de la Corte y lo que hizo la semana pasada fue ratificar lo que está en la ley.
Además aseguró que no hay violación a los derechos de la víctima ni del procesado porque cuando una de las partes apela, en el mismo escrito expresa los agravios o motivos de inconformidad y la contraparte se limitará a pronunciarse sobre cada agravió escrito.
También explicó que esta práctica no se contradice con la oralidad del proceso penal porque solo en primera instancia tienen que estar todas las partes por ley, mientras que en las apelaciones no es necesario, “porque no es juicio, es discusión sobre derecho”.
También agregó que si el apelante es la defensa e introdujo su escrito de agravios, pero a la hora de la audiencia no se presenta ni él ni el fiscal, se levanta el acta de ausencia de las partes y se procede a fallar el caso sin necesidad de audiencia. “No se viola ningún derecho porque los del procesado están garantizados en los agravios”, dijo Aguilar. Estas mismas reglas se aplican a los acusadores autónomos.
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