Por William José Aragón Rodríguez
Corresponsal/Madriz
El ganado que era propiedad de la reconocida familia Pineda, era conducido hacia una finca cercana, y a pesar de que los arriadadores llevaban banderas rojas como señales, el conductor no los pudo esquivar y se pasó llevando a las once vaquillas de raza.
Los dueños de los animales aseguraron que las perdidas por las 11 vaquillas muertas y otras varias que quedaron fracturadas y que tuvieron que ser sacrificadas ascendían a más de 6,600 dólares, las cuales al parecer serían asumidas por el transportista.
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Ante el escaso pasto en los potreros de sus fincas por la llegada del verano, muchos productores de ganado sueltan las reses para que pasten fuera de sus propiedades, principalmente a orillas de las vías, lo que ha provocado varios accidentes.
El pasado fin de semana, el conductor de un bus marca Internacional, color multicolor, placa MZ-38, propiedad de Rigoberto Caballero González, colisionó a varios semovientes que eran llevados sobre la vía principal a una finca de Telpaneca, en Madriz, dejando tres vaquillas muertas y seis quebradas.
Las autoridades de Tránsito de la Policía de Madriz, señalaron que el accidente se debió a la imprudencia del conductor del bus, Alonso Jasi Rodríguez Maradiaga, porque desatendió las señales visibles que llevaban los arriadores de unos 32 semovientes.
Juan José Úbeda Tercero, propietario de un camioncito de la ciudad de Estelí, y que continuamente viaja a las zonas de Telpaneca y San Juan del Río Coco, en Madriz, dijo que existe una ley municipal que mandata la retención de ganado que sea encontrado sobre las vías y la multa a sus propietarios.
El lunes el comisionado mayor José Antonio López Dolmus, dijo que el problema es que hay una tradición de los finqueros de sacar las reses de sus propiedades para que se alimenten de pasto en las orillas de los caminos. A la vez que recomendó a los conductores a viajar despacio y respetar la señales debidas.