Los turistas que visitan Granada tendrán una nueva opción en su agenda de paseo, pero con la oportunidad de transformar vidas. El Café de las Sonrisas es el proyecto social que abrirá sus puertas al público con el propósito de materializar una fuente de trabajo para un grupo de jóvenes sordomudos.
Taller de hamacas
Prieto, de origen español, es el creador de esta obra, pero antes de esta cafetería ya ha logrado posesionar en el mercado local un taller donde un grupo de 30 chavalos y chavalas con capacidades diferentes han aprendido a elaborar hamacas.
Los jóvenes trabajan media jornada porque deben estudiar. “Hemos querido que los chavalos se integren a la sociedad por medio de su propio trabajo y el sábado reciben su pago”, dijo Prieto.
La cafetería nace de la necesidad de otros muchachos con discapacidades que no podían ingresar al taller de las hamacas por falta de espacio. “Yo soy chef y me dije bueno voy a enseñar lo que yo sé hacer y fue así que nació la idea del Café de las Sonrisas”, dijo Prieto.
Dijo que el objetivo es que los clientes vivan experiencias que refuercen el pensamiento positivo de la integración y desarrollo —en el mundo laboral— de personas discapacitadas.
El Café de las Sonrisas busca difundir un turismo responsable, pero además que se fomente la contratación de personal con discapacidad. Esta cafetería cuenta con todas las herramientas para que el cliente pueda comunicarse con los muchachos que trabajan en cocina, recepción y de meseros. En cada mesa hay símbolos para lograr esa comunicación.
Merecen oportunidad
Para el 1 de marzo se prevé abrir este nuevo local en donde solo se ofrecerán desayunos y será la primera cafetería de toda América y la cuarta en el mundo que será exclusivamente dirigida por personas con deficiencia auditiva y oral, dijo Antonio Prieto, director del proyecto social Tío Antonio.