Génesis Hernández
Pese a que la historia sigue demostrando que Nicaragua es un país muy vulnerable a los problemas emocionales, con mucha inestabilidad social, económica, política, sometido a constantes desastres naturales y crisis políticas como guerras y protestas, el cuido a la salud mental no es percibido como importante para la mayoría de la población, concluyó la Asociación Nicaragüense de Psiquiatría, al celebrar hoy sus 30 años de fundación.
En el país los problemas de salud mental más sentidos, según el doctor Mauricio Sánchez Morales, siquiatra, son “el suicidio, la drogadicción, el trastorno de déficit de atención en la niñez, la bipolaridad en los adultos, los producidos por el hombre, como las guerras, todo eso influye en la frustración y afecta la salud”, dijo.
Ver en la versión impresa las páginas: 3 A