TEGUCIGALPA/AFP
Vándalos causaron este lunes un corte de tres horas en la electricidad en el 80% de la capital hondureña, al robar unos tornillos que hicieron caer cinco torres de las líneas de transmisión, informaron fuentes de la estatal Empresa Nacional de Energía Elécrica (ENEE).
Según el asesor de la ENEE, Percy Buck, desconocidos robaron unos tornillos de las gigantescas torres metálicas que sostienen las líneas que transmiten la energía hacia la capital desde la central hidroeléctrica El Cajón, situada 170 km al norte de Tegucigalpa.
“No se puede hablar de sabotaje pero sí de vandalismo”, dijo a la prensa el asesor, quien descartó especulaciones en el sentido de que el apagón fuera una eventual represalia por el incendio de la cárcel de Comayagua, la madrugada del pasado 15 de febrero, que dejó 361 reos muertos.
Subrayó que “lo que sucedió es que se robaron piezas vitales de las torres (…) de la línea de El Cajón a Suyapa (este de la capital) y se cayeron cinco torres” en una zona de difícil acceso en la periferia noreste de Tegucigalpa, lo que dificultó las labores de reparación.
Buck admitió que la reparación definitiva de las torres tardará “varios días”, pero aseguró que el servicio fue restablecido después de tres horas gracias a un arreglo de emergencia. Honduras tiene una capacidad instalada de 1,400 megavatios hora y una demanda que en horas pico alcanza cerca de los 1,300.
La población de la capital, de poco más de un millón de habitantes, sufrió las consecuencias del apagón, especialmente por la salida de operación de los semáforos, lo que provocó severos congestionamientos de vehículos.