Lucydalia Baca Castellón
Incrementos anuales acumulados del dos por ciento en el cemento, un siete por ciento en tubos y accesorios de PVC y porcentajes superiores en la madera y el zinc, registrados en la última década, han elevado el Índice de Precios de Materiales de Construcción (IPMC) a un récord histórico de 970.6 puntos.
Pese a que los materiales de construcción tienen el precio más alto registrado hasta ahora, en lugar de frenar la actividad, esta ha logrado un repunte considerable en los últimos cuatro años.
En 2011 la construcción cerró como la segunda actividad económica de mayor crecimiento interanual con 17.4 por ciento, según cifras del Banco Central de Nicaragua. Y las perspectivas para el 2012 son similares o superiores.
Esto se lograría gracias a la inversión pública en infraestructura y al repunte en la construcción de viviendas.
“Desafortunadamente solo entre el año pasado y este hubo un incremento del 8.7 por ciento en el IPMC, eso es bastante alto. Fue empujado especialmente por el precio internacional del acero y sus derivados, que subió un 25.6 por ciento. Estas alzas nos mantienen expuestos a pérdidas porque son precios que vienen de afuera y que no podemos controlar”, asegura Benjamín Lanzas Somarriba, presidente de la Cámara de la Construcción (CNC).
Pero estar expuestos a “pérdidas” no ha impedido el repunte del sector, empujado principalmente por la inversión pública en infraestructura financiada con fondos de la Alianza Bolivariana para los pueblos de América (Alba), del Banco Mundial (BM), del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) y del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
40% del valor de la construcción se atribuye al costo de la mano de obra.
40% de los gastos se hacen en materiales de construcción.
20% es el costo de la maquinaria y equipos usados durante la obra.
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40% y a veces hasta 50 por ciento del costo corresponde a la maquinaria y equipos usados.
40% se atribuye al gasto en materiales.
10% por ciento del valor total de la obra es destinado al pago de mano de obra.
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La inversión privada también ha dado su aporte a través del repunte de la construcción de vivienda, especialmente la vivienda social.
“En 2011 se colocaron 3,500 casas desde la empresa privada, 400 más que en 2010. Hace tres años se colocaban únicamente 700 casas por año. La Cámara tenía 20 socios, ahora tiene 70. Eso demuestra que la empresa privada está apostando por el sector”, indica Alberto Atha, presidente de la Cámara de Urbanizadores de Nicaragua (Cadur).
ALZAS NO FRENAN LAS VIVIENDAS
A pesar de que las alzas en los precios de los materiales se han trasladado al precio de la vivienda, eso no ha frenado las ventas.
Hace tres años el costo de la vivienda social era de 14,000 dólares. Hoy esa casa cuesta alrededor de 17,500 dólares y “es cuando más se venden”, dice Atha.
En la actualidad existen entre 60 y 70 proyectos habitacionales, cuyos costos de inversión, dependiendo del tamaño del proyecto, oscilan entre uno y tres millones de dólares.
Para Atha el esfuerzo de la banca privada al crear las condiciones para proporcionar crédito a sectores que antes no tenían acceso a él han sido la clave de este crecimiento. “Hace diez años ni siquiera se construían viviendas básicas, porque los bancos no las financiaban. Desde hace tres años estamos construyendo y vendiendo muchas casas de ese tipo”, asegura.
Cadur considera que la contribución activa del Gobierno, para resolver las necesidades del sector, es fundamental para continuar en la vía del crecimiento.
HAY AMENAZAS
El presidente de la CNC advierte que la combinación del incremento salarial con el incremento del IPMC, las constantes alzas en el precio de los combustibles y otros derivados del petróleo, y las alzas en el precio de la energía eléctrica, podrían ocasionar un desaceleramiento del crecimiento logrado el año pasado.
Pero por el momento el 2012 pinta muy bien para el sector, ya que está previsto el inicio de megaproyectos como el Hospital Militar, que además creará alrededor de 1,000 empleos directos.
El sector también espera el arranque de las obras en la hidroeléctrica Tumarin, minihidroeléctricas promovidas por el Ministerio de Energía y Minas (MEM) en diversas comunidades, proyectos de la Empresa de Acueductos y Alcantarillados (Enacal), del Ministerio de Salud (Minsa) y del Ministerio de Educación (Mined).
“Esperamos que sea un año positivo. Ojalá los precios se mantengan. Que no tengan un crecimiento tan alto como en el 2011 y que podamos mantener el crecimiento que tanto nos ha costado”, indica Lanzas.
BUSCAN MANTENER PRECIOS
Según Jorge Paredes Ortega, director comercial y de logística de Cemex, la empresa ha realizado muchas inversiones para disminuir los costos de producción, especialmente con el uso de combustibles alternos, para que el incremento en el precio del cemento provoque la menor repercusión en el mercado. “Eso ha permitido que los incrementos en la tarifa eléctrica y los combustibles no se correspondan a los incrementos actuales”, asegura.
Por su parte Juan Agustín Vega, gerente general de Durman, afirma que a pesar que la empresa depende de los precios internacionales de la resina, han logrado que la tubería y accesorios, ventanas y equipos de bombeo y tratamiento de agua de PVC, que fabrican, sean los menos afectados por las alzas y de esta manera no provocar alzas en la construcción de viviendas.