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El director artístico de Chanel, el alemán Karl Lagerfeld, se sumergió en un mundo maravilloso de cuarzos, cristales y minerales para presentar el martes las propuestas de esa lujosa casa francesa para el próximo otoño e invierno, marcadas por el brillo y la opulencia.
Desde el primer modelo, un abrigo azul noche sobre un pantalón estrecho y botines altos decorados con cristales, Lagerfeld envió un mensaje de lujo y fantasía, que contrastó con el minimalismo y los colores sombríos de algunos de los podios de esta Semana de la Moda de París, que concluye el miércoles.
Su colección mezcló trajes de tweeds con faldas de seda transparente sobre leggings brillantes, mallas color caramelo con jerseys largos tipo vestido y pantalones hilvanados con hilos metálicos.
Como Coco Chanel, la fundadora de la firma, Lagerfeld, se inspiró en el vestuario masculino, inventando el “nuevo tres piezas” de la casa: un pequeño vestido sobre pantalón y chaqueta corta, en tonos azul profundo adornado con cristales, que se perfila como la apuesta de Chanel para la próxima temporada invernal.
Para aguantar el frío el modista alemán propuso cazadoras en pieles sintéticas y conjuntos bordados de plumas, “porque la pluma —dijo— es la piel más suave”.
La pasarela Chanel, que se celebró en una plataforma instalada bajo la majestuosa cúpula del Grand Palais, atrajo a celebridades como la cantante estadounidense Katy Perry, que lucía un ligero vestido negro y peluca azul.
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