Por Juan Carlos Tijerino A.
Como nació con discapacidad (ciega y con síndrome de Down), a Jessica Castillo Quintero su abuela y tío, por el lado materno, se encargaron de cuidarla.
Por lo “bien cuidada” que estaba, sus vecinos daban por hecho que cuando esta se muriera seguramente sería por causas naturales.
Supuestamente han pasado meses y el hombre sigue sin superar su duelo. “Él (César Castillo Quintero) la cuidaba bien y la sacaba a pasear. Los domingos la llevaba a misa y en diciembre andaban en la Gritería.
A ella la mandaron de vacaciones a Costa Rica y prefirió regresarse porque decía que le hacía falta su tío”, expresó una vecina del lugar que se identificó como María.
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Ayer a primera hora se enteraron que estaban equivocados. César Castillo Quintero, quien durante años cuidó a su sobrina de 23 años, sorpresivamente mató sin motivos aparentes a la joven.
El hombre, de 53 años, supuestamente le provocó una herida profunda en el cuello. También le habría propinado varios golpes en la cabeza.
Los vecinos manifestaron que no se enteraron de lo sucedido hasta que vieron llegar a la vivienda, en el barrio Libia, Managua, a varios agentes de la Policía.
Supuestamente a eso de las 6:00 de la mañana se escucharon algunos gritos, pero nadie creyó que se tratara de un asesinato.
Aparentemente la víctima sufría de dolores de cabeza y constantemente gritaba. Por esa razón es que ningún vecino prestó atención a la bulla que se escuchó.
No obstante, se maneja que el sospechoso tras cometer el crimen salió de la casa y buscó a sus hermanos que habitan en un barrio cercano, para informales lo que había sucedido.
Posteriormente regresó a la escena del crimen y fue arrestado por la Policía. Al momento de su detención dijo que no quería morirse y dejar sola a su sobrina.
ES PARANOICO
Familiares del sospechoso del crimen manifestaron que la desgracia podría haber ocurrido porque este padece de esquizofrenia.
Alegaron que comenzó a padecerla porque durante varios años consumió drogas.
Los vecinos al escuchar la versión aseguraron que la supuesta enfermedad es un invento para justificar el ataque y evitar responsabilidades.
La Policía del Distrito Cuatro está a cargo de investigar el caso.
El cuerpo de la joven fue trasladado al Instituto de Medicina Legal.
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