Esta semana se ha conmemorado el décimo aniversario del golpe cívico-militar del 11 de abril de 2002 en Venezuela, que derrocó a Hugo Chávez, así como del contragolpe militar que lo restauró en el poder apenas dos días después.
Fueron dos los factores principales que determinaron el fracaso del golpe cívico-militar contra Chávez, el cual tenía el objetivo de restaurar la democracia en Venezuela. Uno de ellos fue la falta de apoyo de Estados Unidos al derrocamiento de Chávez, que dejó a los golpistas sin el sólido respaldo externo que era decisivo en aquellas circunstancias. Y el otro factor fue la rápida y resuelta reacción del general Raúl Baduel, quien encabezó a un sector del Ejército para revertir el golpe contra Chávez, rescatarlo de donde se encontraba detenido y a punto de ser enviado al exilio en Cuba, y reinstalarlo en el poder.
Ahora, diez años después de aquellos acontecimientos que cambiaron el rumbo de la historia de Venezuela y de toda América Latina, el general Raúl Baduel se encuentra preso en una inmunda cárcel chavista, sufriendo las amargas consecuencias de los dos errores políticos más graves que ha cometido en su vida: ayudar a Chávez a tomar el poder, en 1999, y haberlo restaurado después, en el año 2002.
Baduel es un militar de carrera que en diciembre de 1982 fundó, junto con Hugo Chávez y otros dos miembros del Ejército de Venezuela, el Movimiento Bolivariano Revolucionario – 200. Después acompañó a Chávez en la organización del partido Movimiento Quinta República y le ayudó a ganar la elección presidencial en diciembre de 1998. Y finalmente el general Baduel se consagró como gran héroe chavista, al revertir audazmente el golpe cívico militar que había derrocado a Hugo Chávez el 11 de abril de 2002 y dos días después lo restableció triunfalmente en el poder.
Sin embargo, posteriormente Baduel cometió el pecado político mortal de criticar el anormal culto a la personalidad de Hugo Chávez, así como su intención de imponer una dictadura mesiánica y perpetuarse en el poder. De manera que Chávez acusó a Baduel de corrupción y el 2 de abril de 2006 lo hizo condenar a 8 años de prisión, de la cual podría no salir con vida.
El general Baduel ha vuelto a ser noticia en estos días, debido a que en vísperas del décimo aniversario del golpe y el contragolpe militar de abril de 2002 logró grabar en prisión y difundir exteriormente, un vídeo en el cual reitera su denuncia contra la dictadura de Chávez y llama a los venezolanos a derrotarlo, para que el país pueda retomar la senda democrática.
Dentro de la cárcel donde sufre un cruel castigo por haberse atrevido a grabar y difundir ese vídeo de rebeldía, seguramente el general Baduel rumia su amargura y arrepentimiento por haber apoyado a Chávez y contribuido a la destrucción del sistema democrático de su país. Y, paradójicamente, su única esperanza radica en el restablecimiento de la democracia que él denigró, atacó y contribuyó a aplastar.
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