Lucía Navas
El Gobierno de Nicaragua reiteró ayer ante el Fondo Monetario Internacional (FMI) que habrán este año reformas en el Sistema de Pensiones y en el de impuestos, pero que las mismas responderán “al consenso” que acuerden con empresarios, sindicatos y demás actores sociales de “lo que más conviene” en el país.
El presidente del BCN, Alberto Guevara, valora que como país “estamos en una posición ventajosa” “y sin presiones” tanto en la revisión actual que realiza el FMI, como de cara a negociar un nuevo acuerdo macroeconómico, que sí interesa obtener al Gobierno.
Esas condiciones, dice, las da el haber “cerrado el programa anterior con éxito”, mantener la estabilidad cambiaria y financiera y una economía en crecimiento. Aunque “el gran reto” es hacer crecer arriba del cinco por ciento y mayores reducciones de los índices de la pobreza.
[/doap_box]
Alberto Guevara, presidente del Banco Central de Nicaragua (BCN), asegura que así lo dejaron claro a la misión del FMI, que desde ayer realiza el examen a las finanzas y economía del país, en lo que se conoce como revisión del Artículo IV.
CAMBIOS GRADUALES
“No podemos venir a hacer transformaciones que le vayan a cambiar las reglas de juego de la noche a la mañana a alguien”, afirmó Guevara.
Sobre la Seguridad Social el Gobierno ha propuesto en un documento público que se aumentaría la edad de jubilación después de los 65 años, así como las semanas de cotización.
“Aquí el diálogo está crudo”, dice Guevara refiriéndose al hecho que las discusiones con empresarios y trabajadores serán en el segundo semestre. Pero deja saber que los cambios a adoptar sobre la jubilación seguirán el “principio de gradualidad”, tomando en cuenta factores como el tipo de trabajo que se realiza.
“Póngase usted en los zapatos de una señora que se va a jubilar dentro de dos años de acuerdo con las reglas actuales, y de pronto vengamos y les digamos que ahora se va a jubilar en diez años(…) En un contexto de un país que avanza tomando en cuenta los principios de la democracia, de la justicia social, no podríamos hacerle eso a una persona”, afirma.
INCENTIVOS QUE CONVENGAN
La reforma más inmediata que el Gobierno impulsará es la tributaria, sobre la cual ya el Ministerio de Hacienda tiene una propuesta que comenzará a discutir con los empresarios las próximas semanas.
Guevara no adelantó la propuesta. Dice que evitarán “desincentivar a los agentes económicos”, porque “estarían en contra de los mismos intereses de la nación” en lograr un crecimiento económico superior al cinco por ciento anual. Confirma sí que se eliminará exoneraciones y excepciones fiscales.
José Adán Aguerri, presidente del Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep), sostiene que se negociará sobre cuatro aspectos de las exoneraciones, donde unas “que ya cumplieron su cometido” serán eliminadas, otras que aún tienen utilidad deben continuar, pero poniéndoles límites. Pero el Cosep también va porque se mantengan incentivos “libres” “para asegurar la competitividad” y porque se creen “nuevas para competir con el resto de Centroamérica”.
Ver en la versión impresa las páginas: 2 C