Lucydalia Baca Castellón
Según Lacayo, el precio que actualmente paga la empresa es 30 por ciento más alto que el del año pasado. “Las personas que promueven la huelga fomentaron durante el verano un incremento irracional del precio”, explica.
Para el directivo de Parmalat, Enrique Zamora, las afectaciones serán para todo el país, ya que las medidas drásticas “nunca dejan nada bueno”.
Considera que el sector formal está en disposición de dialogar para buscar arreglos, pero advierte que con el sector informal será más difícil establecer consenso.
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Representantes de la Federación de Asociaciones Ganaderas de Nicaragua (Faganic) se reunirán hoy al mediodía con el Ministro Agropecuario y Forestal, Ariel Bucardo, en busca de soluciones que impidan la suspensión de la entrega de leche y queso anunciada por productores de Boaco, Chontales, Río San Juan y la Región Autónoma del Atlántico Sur (RAAS). La retención iniciaría mañana provocada por la baja en el precio del producto.
Faganic apoya la suspensión de la entrega de leche a los acopiadores informales y queseras artesanales, que han reducido el precio del galón de leche de 36 a 15 córdobas. Pero no aprueba que la medida afecte también a las plantas industriales, dijo el presidente de Faganic, Solón Guerrero.
El Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep) por su parte, llamó a los ganaderos a reconsiderar la decisión para evitar afectaciones a las plantas industriales por un problema provocado por la baja en el precio que han aplicado los acopiadores informales y queseros artesanales. Solo entre un 35 y 40 por ciento de la leche que se produce en el país es acopiado por las plantas industriales.
“Eso significa que hay un 60 o 65 por ciento de la producción de leche que no tiene nada que ver con las plantas procesadoras. Está relacionado con sectores artesanales, con queseros, con comerciantes de otros países, salvadoreños, hondureños, que llegan a las montañas a hacer el acopio”, dijo el presidente del Cosep, José Adán Aguerri.
Añadió que ya se ha discutido el problema con el Gobierno, porque este es un sector informal, que no paga impuestos y que hace “competencia desleal” a las plantas procesadoras, lo cual tiene una “implicancia” en la diferencia de precios que se pagan dentro del sector.
Las procesadoras han dispuesto que si durante el paro les dañan alguna pipa, suspenderán todo el acopio.
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