Lucía Navas
Reconociendo que la relación comercial con Estados Unidos (EE. UU.) es la base del impulso del crecimiento económico del país, funcionarios de Gobierno y empresarios destacaron en Washington el buen clima de negocios que hay en Nicaragua para las inversiones extranjeras.
Arana dijo que pese a los desafíos políticos por resolverse, empresarios y Gobierno “estamos interesados y comprometidos con el mejor destino, y creemos que el país está listo para dar ese salto (en desarrollo), pero debemos asegurarnos que esto es sostenible política y socialmente y es un gran reto para el liderazgo nacional (Gobierno) y empresarial”.
[/doap_box]
En el foro “Nicaragua y su economía: Perspectivas para el crecimiento”, realizado ayer en Washington, capital de EE. UU., la Cámara de Comercio Americana de Nicaragua (Amcham) y la agencia de Promoción de Inversiones (ProNicaragua), promovieron que pese a existir aún debilidades en el área institucional las oportunidades de negocios están aseguradas.
Álvaro Baltodano, delegado presidencial para las inversiones, destacó que “gracias al Cafta (Tratado de Libre Comercio con Centroamérica y República Dominicana), Estados Unidos es por mucho el principal mercado del destino de nuestras exportaciones”.
Mencionó que con el Cafta el comercio bilateral entre EE. UU. y Nicaragua creció 67.5 por ciento en los últimos años.
Igual de importante es el peso de las inversiones de EE. UU., pues sumaron 759.83 millones de dólares entre 2007 y 2011, siendo el principal país de origen de las inversiones recibidas.
Y si bien Baltodano admitió que “la perfección no existe”, se avanza en mejorar el poder judicial para dar la seguridad jurídica exigida por los inversores, especialmente en cuanto al respeto a la propiedad.
Igualmente hay avances, según ProNicaragua y Amcham, en que los sistemas de trámites para concretar un negocio sean rápidos y eficientes.
DIÁLOGO FUNCIONA
Las bases del crecimiento económico que percibe Nicaragua son: inversión, seguridad ciudadana, energía, estabilidad macroeconómica y paz social, identificaron los empresarios.
Yalí Molina, presidente de Amcham, dijo que al haber “aprendido a dialogar” y establecer una alianza entre Gobierno y empresarios es que se consigue “cambiar la cara del país” a nivel interno, que favorece que esté creciendo la inversión.
Un reto inmediato para Molina es conseguir que las diferentes embajadas de los países actualicen en sus páginas web la información sobre el clima de negocios y de seguridad de Nicaragua, pues muchas aún lo ubican en niveles peor que el resto de Centroamérica, cuando —afirma— es lo contrario.
El presidente de la Asociación de Cámaras de Comercio de América Latina (Aaccla), José Orive, respaldó que “Nicaragua va por buen camino”, especialmente en seguridad ciudadana, lo que permite al empresario dedicarse a lo suyo; generar prosperidad, crecimiento y empleos. “La tranquilidad que yo tengo caminando a medianoche con una computadora al hombro por Granada no la tengo en mi país (Guatemala)”, dijo.
Ver en la versión impresa las páginas: 2 C