Fernando Czyz/Argentina/EFE
Hace casi un año, David Trezeguet fue testigo del descenso del equipo de sus amores en la tribuna del estadio Monumental, de Buenos Aires.
Campeón del Mundo en 1998 y ganador de la Eurocopa 2000 con Francia, el nacido en la ciudad de Ruan sumó ayer el octavo título a su carrera profesional.
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Pero 363 días después el futbolista francés de ascendencia argentina fue el artífice con dos goles del regreso del River Plate a la primera división del futbol argentino.
“Hoy cumplimos con el objetivo de regresar a River donde se merece, la primera división. Estoy muy feliz por poder haber contribuido para conseguir la meta”, declaró el cañonero tras consumar el ascenso.
Con 13 goles convertidos, David Trezeguet se transformó en el baluarte de este conjunto millonario que por los malos resultados y las decisiones polémicas de sus directivos se vio obligado a transitar durante una campaña en la segunda división.
Fue el más duro desafío para un club que lleva 111 años de vida institucional y rebaña a una auténtica nación de hinchas.
Con apenas 17 partidos disputados con la camiseta de River entre torneo Clausura y Copa Argentina, el exjugador del Mónaco francés, el Juventus italiano y del Hércules español se retiró ayer ovacionado del estadio Monumental.
Con estos 13 festejos en solo una ronda de esta temporada, Trezeguet fue el segundo goleador de River Plate a seis tantos de los convertidos por Fernando Cavenaghi y la mitad de Gonzalo Castillejos (26), máximo artillero del torneo.
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