José Adán Silva
No tenía ni 12 horas de haber entrado a la finca que peleó durante 12 años al Estado de Nicaragua, desde que se la invadieron en los años ochenta, cuando a punta de balas estaban tratando de arrebatársela otra vez.
Eddy Víquez Polex, ciudadano estadounidense, denunció ayer que un grupo de hombres armados trató de ingresar el lunes por la noche en la propiedad que había recibido de manos del propio procurador general de la República, Hernán Estrada, solamente unas horas antes.
La Procuraduría General de la República entregó el pasado lunes 16 de julio a Víquez Pollex una finca de herencia familiar, como parte de los compromisos del Estado de Nicaragua por resolver a los ciudadanos estadounidenses sus reclamos por confiscaciones,
Los vigilantes que Víquez había dejado por la tarde en la propiedad, que se ubica en el kilómetro 16 y medio de Carretera Norte, notaron como a eso de las 7:00 de la noche el movimiento de varios hombres en la oscuridad y al gritarles que se identificaran, recibieron varios balazos como respuesta.
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De acuerdo con el relato del dueño de la propiedad, el antiguo ocupante de la finca San Jorge, Óscar Ruiz, supuesto excombatiente sandinista y militante de ese partido, había advertido a varios vecinos que él no saldría de la finca fácilmente y que sacaría “vivos o muertos” a sus nuevos y legítimos ocupantes.
Víquez Pollex figura en la lista de los 65 casos de propiedad resueltos por la PGR, como parte del compromiso anual de Nicaragua con Estados Unidos, para acceder al waiver o dispensa de la propiedad, que permite a Nicaragua acceder a fondos de organismos financieros internacionales.
Dicho aval está pendiente de aprobarse para el período 2012-2013, y su plazo vence el 29 de julio próximo.
El denunciante, quien no habita la finca de 100 manzanas por haber sido desmantelada durante los más de 25 años de ocupación ilegal, aseguró que cuando recibió la noticia de que habían atacado la finca, llamó de inmediato a la Policía de Tipitapa, donde le dijeron que mandarían una patrulla que nunca llegó.
De acuerdo con el relato, un oficial de la Policía se presentó a eso de las 10:00 de la noche en un vehículo particular a preguntar qué había pasado; cuando le explicaron que había habido un intercambio de disparos entre los vigilantes y los sospechosos, anotó algunas cosas, prometió volver a la mañana siguiente a indagar y sugirió que fueran a poner la denuncia formal para proceder al proceso de investigación. Víquez dijo a LA PRENSA que informó del caso a la PGR y a la embajada de Estados Unidos en Managua y que estudia con su abogada Ligia Velásquez qué acción judicial tomarán.
“Pasé muchos años peleando una propiedad familiar y ahora que la he recuperado, me la quieren quitar a la fuerza, ya hasta me da miedo que me embosquen cuando vaya para allá”, denunció Víquez Pollex.
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