Martha Vásquez
Dos testigos con rostros ocultos que comparecieron ayer en la continuación de la audiencia del juicio contra Henry Fariñas y 23 procesados más por crimen organizado, lavado de dinero y transporte internacional de droga, relacionaron al costarricense Alejandro Jiménez, alias “El Palidejo”, con la supuesta estructura narco liderada en Nicaragua por Henry Fariñas, y aseguraron que lo llamaban “el jefe”.
Uno de los testigos fue el trabajador de un taller de enderezado y pintura de automóviles, quien testificó que al local llegó el procesado Felipe Mendoza (quien según acusación del Ministerio Público era conductor escolta de “El Palidejo” en Nicaragua) a dejar un carro marca Audi, año 2005, para darle servicio de mantenimiento.
Días después que Mendoza dejó el carro en el taller, llegaron María Durley Vílchez y José Treminio (el nombre que Alejandro Jiménez usaba en Nicaragua), presentándose como dueños del mismo.
“Es una abierta violación al ejercicio de la defensa, prácticamente nos ha cercenado demostrar la no responsabilidad de nuestros representados. Aquí han pasado cosas jamás vistas, que el testigo le pregunte al juez si responde o no sin que el fiscal haya objetado y ella (judicial) concede, es inaudito”, dijo Chavarría.
[/doap_box]
“Durley y Treminio se trataban como pareja. Los demás se referían a él (Treminio) como jefe”, dijo el testigo.
Luego llegaron a dejar una camioneta BMW, color negro. En esta ocasión el vehículo fue llevado por Guillermo Blandón, quien según acusación era quien importaba vehículos usados de Estados Unidos para luego ser modificados para el traslado de droga y dinero.
Blandón llegó acompañado por Treminio (Alejandro Jiménez), dijo el testigo.
Después le llevaron tres vehículos más, un BMW, un Audi y un Porsche para que los repararan, pero el costo era muy alto y los dejaron ahí.
“Hicimos tres presupuestos a inicio del 2011, pero no fueron aprobados. Recibía llamadas del señor Treminio de fuera del país porque no era el código de área de Nicaragua. Después del asesinato en Guatemala del señor Facundo (Cabral) no hubo más comunicación y no tenía dónde llamarlos porque me llamaban de números ocultos”, relató el testigo, quien aseguró que perdió 120 mil córdoba porque meses antes del escándalo había comprado uno de los autos de Treminio por esa cantidad de dinero.
“EL PALIDEJO” EN EL ELITE
El otro testigo que relacionó a “El Palidejo” con los demás acusados fue el contador del night club Elite, quien trabajó desde el 2005. Expresó que durante el tiempo que trabajó ahí escuchó al personal artístico y meseros que el señor José Treminio llegaba al Elite acompañado por Henry Fariñas y pagaba buena propina. “Gastaba entre tres mil y cinco mil dólares en un anoche, según los reportes”, dijo el testigo.
Una exmaquillista del Elite también dijo que Hugo Jaens era el gerente general del Elite y que en ese club se celebraba el aniversario de la Harley Davidson. “Llegaban los harleros a celebrar con Guillermo Terán”, dijo la extrabajadora del Elite.
El contador del Elite también señaló a Terán como una de las firmas libradoras del Elite.
ILIQUIDEZ DEL ELITE
El contador además expresó que el club en sus inicios tenía ingresos de setenta mil y cien mil dólares mensuales, pero en los últimos años los ingresos eran entre cuarenta y 48 mil dólares y los egresos o gastos eran similares, por eso se les retrasaba el pago a los trabajadores y se tenía que pedir ayuda al Elite de Panamá.
Asimismo aseguró que le pedían que no declarara los debidos impuestos ante la Dirección General de Ingresos. También agregó que escuchó de las bailarinas que se consumía droga en el local. “Escuché expresiones como: ‘qué barbaridad, don Hugo (Jaens) se puso loco’. Eso era después de cocainarse”, dijo el testigo.
En la audiencia de ayer pasaron ocho testigos, la mayoría civiles, con rostros ocultos. Para hoy se espera que declare una cantidad igual o mayor.
Ver en la versión impresa las páginas: 1 A ,6 A