José Denis Cruz
La disminución de los sismos es una bocanada de aliento para las comunidades que habitan en las faldas del volcán San Cristóbal, y para el Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter) es un indicio de que el coloso está buscando la normalidad.
Aún así en los departamentos de Chinandega y León se mantienen las alertas amarilla y verde respectivamente, según informó en conferencia de prensa el secretario ejecutivo del Sistema Nacional para la Prevención, Atención y Mitigación de Desastre (Sinapred), Guillermo González.
“Hay una tendencia a la búsqueda de la normalización, sin embargo aún hay presencia de un tremor de microsismo y abundante emisión de gases”, señaló González.
Por su parte, el asesor de Educación de la Presidencia, Salvador Vanegas, informó que el próximo miércoles se reanudarán las clases en Chinandega, luego de mantenerse suspendidas desde hace dos semanas cuando el coloso presentó un proceso eruptivo.
Según la página web del Ineter se han registrado cinco sismos en el Pacífico nicaragüense, de ellos el más fuerte se dio a las 2:24 p.m. con una magnitud de 3.1 en la escala de Richter y una profundidad de 15 kilómetros.
Costa Rica y El Salvador registraron sismos entre 3.2 y 3.8 en la escala de Richter.
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