Wendy Álvarez Hidalgo
Nicaragua solo produce arena y cemento. El resto de materiales de construcción se importa. Pese a esto, el sector proveedor de estas mercancías asegura estar listo para abastecer los megaproyectos que el Gobierno ha anunciado, incluido el canal seco. La estabilidad en el precio de los materiales ha animado aún más al sector que actualmente está apostando por la autoinversión para ampliar sus capacidades de operación y producción.
La Cementera Mexicana (Cemex) realiza una inversión de 5.8 millones de dólares para ampliar su capacidad operacional, en esa misma línea lo hizo la compañía Productos Industriales de Concreto (Proinco, SA), con 3.2 millones de dólares y también la empresa Cementos y Derivados SA (Cedesa), con 600 mil dólares.
El presidente de la Cámara Nicaragüense de la Construcción (CNC), Benjamín Lanzas, describe así la bonanza: “Hay varias empresas que sí están invirtiendo y aparte de eso se han abierto nuevos bancos de materiales, nuevos concesionarios. Vino hace tres meses una empresa guatemalteca que se llama PreCon y va abastecer de bloques y adoquines al mercado”.
La construcción privada se expandió en el primer trimestre de este año 46.8 por ciento, según el último reporte del Banco Central de Nicaragua (BCN). No obstante, a junio el indicador que mide el nivel de producción de materiales de construcción reflejaba un crecimiento desacelerado del 6.6 por ciento (12.5 por ciento a junio de 2011), según el Índice Mensual de la Actividad Económica (IMAE).
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El tres veces presidente de la Cámara Nicaragüense de la Construcción, Francisco Reyes, señala que no ve necesario que vengan otras empresas del exterior para proveer directamente los proyectos de construcción. “Hay capacidad humana para hacer consorcio con empresas del mundo o centroamericanas. Acá hay empresas fuertes técnica y tecnológicamente”, afirma.
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EN CRECIMIENTO PUJANTE
Lanzas afirma que esperan cerrar este año con un crecimiento superior al 20 por ciento. Entre los proyectos que están impulsando a los proveedores de materiales a invertir figura también el Hospital Militar, “que es el edificio más grande que va a tener Nicaragua”, la ampliación de varias carreteras como la vía que conectará directamente Managua con Granada, que “será una carretera a meter en concreto”.
“Todas estas compañías proveedoras se están alistando”, sostiene Lanzas.
Dolores Prado, gerente país de Holcim Nicaragua, ratificó el dinamismo en el sector principalmente en el área de infraestructura en general. “Por ejemplo, en la zona del Centro y Atlántico estamos construyendo actualmente cuatro puentes. Se está invirtiendo también en carreteras, calles, cauces, proyectos de energía renovable y viviendas de interés social”.
De hecho Holcim estima para este año un crecimiento cercano al 17 por ciento. “Las viviendas de interés social han aportado al crecimiento de la industria, ya que estas viviendas generan obras adicionales de infraestructura en las urbanizaciones y mejoras en las viviendas adquiridas. Creemos que este es un motor importante para el dinamismo de la construcción”, expresa.
CONFIRMAN INVERSIÓN
Los proveedores están invirtiendo en sus capacidades de producción. Francisco Silva Lazo, gerente general de Mexichem, Amanco en Nicaragua, dijo que “si mañana se ejecutara uno de estos megaproyectos nosotros moveríamos toda nuestra logística para abastecerlos”. De hecho sostuvo que la empresa, cuya casa matriz está en México, está haciendo una inversión de cuatro millones de dólares en su planta que tienen en Costa Rica, que sería una abastecedora directa para Nicaragua.
“Estamos invirtiendo en nuevos molinos, tecnología de punta y estamos ampliando capacidades”, especifica. Esa compañía con presencia en 14 países de Latinoamérica y 29 en Europa y Asia, provee de materiales de PVC.
De este entusiasmo del que goza la construcción no escapa la Distribuidora de Materiales de Construcción SA (Dimaco). Su gerente general, Camilo López, dice que en un mundo tan globalizado como el de hoy la ventaja que existe es que en cuestión de días se puede importar de cualquier parte del mundo materiales de construcción.
López reconoció que el país necesitaría importar maquinaria para desarrollar los proyectos, medida que no será un obstáculo para garantizar la disponibilidad de los mismos. Por ejemplo, señala que si se construyera el canal seco sin duda se elevaría drásticamente la compra externa de productos como el acero y maquinaria.
PRECIOS ESTABLES
Y es que la construcción no solo goza este año de un buen desempeño en sus indicadores de crecimiento, también ha sido favorecida por la relativa estabilidad en el precio de los materiales de construcción: madera y techos, cementos y derivados, sanitarios y piso, metales, entre otros. Al menos esto es lo que afirman representantes de este sector y los datos del Banco Central de Nicaragua (BCN) hasta julio de 2012.
El Índice de Precios de Materiales de Construcción (IPMC) global refleja que entre enero y julio de este año este indicador ha experimentado una variación de 19.9 puntos, al pasar de 986.6 a 1,006.5 puntos, respectivamente.
La Cámara Nicaragüense de la Construcción estima que en promedio los precios de los materiales se han incrementado menos del cinco por ciento. No obstante, apunta que hay algunos productos que han subido un diez por ciento.
Lo que es cierto es que si bien han habido aumentos en los precios de los materiales de construcción, el sector refiere que la estabilidad radica en que esos incrementos han sido menores con relación a los últimos dos años.
En este sentido, la gerente país de Holcim Nicaragua señala que a pesar que aquí se ha experimentado una inflación del tres por ciento (2.72 por ciento hasta agosto, según datos del BCN), un incremento del nueve por ciento en el precio de la energía, y combustibles un 4.7 por ciento, “Holcim, en aras de mantener su producto accesible para todos los nicaragüenses, ha incrementado el precio muy por debajo de nuestros incrementos en costos y este solo ha experimentado un aumento del tres por ciento con respecto al año pasado”.
La representante de Holcim agrega que esperan mantener estable el precio del cemento, “a menos que exista otro fuerte incremento en energía o combustible”.
