José Denis Cruz
El doctor Julius Hellenthal, propietario de la clínica de células madre “Curismo”, sigue vendiendo dosis de esperanzas a las personas que padecen enfermedades terminales, bajo la bendición del asesor presidencial para asuntos de salud.
[/doap_box]
Esto explica por qué el Ministerio de Salud (Minsa) no investigó a la clínica, pese a que en un inicio se manejó que trataría con “pinza” el caso, pues algunos funcionarios sandinistas se trataron en dicho centro médico.
Miguel D[Escoto reveló ayer en un programa de televisión nacional que se trató el síndrome de Ménière (enfermedad que afecta al oído) en San Juan del Sur, Rivas, y que se encontraba “mil veces mejor”, sin embargo un otorrino consultado por
LA PRENSA aseguró que tal enfermedad no tiene cura.
Una fuente médica confió que el presidente inconstitucional Daniel Ortega pensó en algún momento tratarse el supuesto lupus que padece en “Curismo”, pero no lo hizo por la “estricta dieta” a la que se debía someter. “¿Dónde ha discutido lo que hace? ¿Qué es lo que le está metiendo a las pacientes? ¿Qué tipo de células son las que usan?”, reaccionó el doctor José Hidalgo Díaz, miembro del Foro Médico Nicaragüense.
“Por qué no se sienta frente a un grupo de científicos a discutir sobre este tema. Lo que él tiene es un negocio. Imaginate que no tienen a ningún biólogo o especialista en terapia celular”, cuestionó Hidalgo Díaz, quien invitó públicamente a Hellenthal a debatir sobre células madre.
Ver en la versión impresa las páginas: 4 A