Nueva York/ AFP
El canciller cubano, Bruno Rodríguez, atacó en la Asamblea General de la ONU la política de Estados Unidos contra su país, tanto por el bloqueo económico como por su decisión de incluir a la isla en la lista de Estados patrocinadores del terrorismo.
En un discurso en el hemiciclo de Naciones Unidas en Nuevas York, Rodríguez acusó además a Estados Unidos y a algunos países de Europa de querer derrocar al gobierno sirio, y defendió la autodeterminación y soberanía de Damasco.
El canciller cubano dedicó buena parte de su mensaje a denunciar políticas de Estados Unidos contra su país y agregó que la inclusión de Cuba en la lista norteamericana de Estados patrocinadores del terrorismo internacional era un modo de justificar el bloqueo económico a la isla.
“El verdadero propósito de mantener a Cuba en ese listado espurio es fabricar pretextos para endurecer la persecución de nuestras transacciones financieras y justificar la política de bloqueo, que ha provocado invaluables daños humanos y económicos”, señaló.
“Es conocido que el gobierno norteamericano ha utilizado el terrorismo de Estado como un arma de su política contra Cuba, que ha provocado 3.478 muertes y 2.099 discapacitados entre nuestros compatriotas, al tiempo que ha cobijado a decenas de terroristas, algunos de los cuales aún hoy viven libremente en ese país”, agregó.
En ese sentido, pidió la liberación de los cinco cubanos detenidos en 1999 bajo cargo de espionaje y condenados a largas penas de prisión en 2001.
En medio de estas denuncias, Rodríguez volvió a tender sin embargo la mano a Estados Unidos “en vísperas de sus elecciones” presidenciales de noviembre próximo, proponiendo una “normalización de las relaciones mediante el diálogo, en pie de igualdad y con pleno respeto a nuestra independencia”.
Por otra parte, y en referencia a la guerra civil en Siria, el canciller cubano denunció un intento de las potencias occidentales de “derrocar” al gobierno del presidente Bashar al Asad armando a grupos opositores y recurriendo a mercenarios.
“El gobierno de los Estados Unidos y algunos de Europa han decidido el derrocamiento del gobierno sirio, para lo cual han armado, financiado y entrenado a los grupos opositores, incluido el uso de mercenarios”, sostuvo. “Gracias, fundamentalmente, a la firme oposición de Rusia y China, no ha sido posible manipular al Consejo de Seguridad, para imponer la fórmula intervencionista aplicada en aventuras bélicas recientes”, añadió.