Gerald Hernández
Gentil como siempre, aún en la sala de un hospital mientras espera que operen del tobillo a uno de sus hijos, Marvin Benard tuvo tiempo para hablar por teléfono sobre Everth Cabrera, el big leaguer nica que está haciendo historia, al ser el líder en robos de bases de la Liga Nacional.
“Estoy sacando las cuatro clases que me hacen falta para graduarme en kinesiología”, revela el nica, cuya siguiente meta es ser un entrenador de bateo de un equipo universitario.
[/doap_box]
“No he tenido la oportunidad de verlo jugar últimamente, pero he seguido las noticias de los periódicos y me parece grandioso lo que está haciendo Cabrera”, señala Benard, quien jugó en las Mayores de 1995 al 2003 con los Gigantes de San Francisco y cifras en mano es el mejor bateador de todos los tiempos que ha producido Nicaragua.
“Creo que la clave es la confianza. Él ahora conoce mejor el juego, ha aprendido mucho y sabe el momento correcto para salir al robo. Recuerdo que cuando era un novato lo atraparon robando en un juego de spring training y me dijo que había hecho todo bien, le había tomado el tiempo al lanzador y había corrido con toda su fuerza, pero lo que pasaba es que no tenía la experiencia y confianza. En las Grandes Ligas tenés que hacer las cosas de forma casi perfecta para que te salgan bien. No podés equivocarte”, opina Benard, quien estafó 105 colchonetas en su carrera de nueve años en las Mayores.
Para Marvin, el liderato de robos de base debe servirle a Cabrera para establecerse en las Grandes Ligas. “Él ya no será simplemente Everth Cabrera. De ahora en adelante será Everth Cabrera el ganador de un liderado de robos. David Roberts hizo una carrera apoyado en la velocidad. Él ayudó a Boston a darle vuelta a una serie playoffs ante los Yanquis en el año que rompieron la maldición con un robo de base y me alegro mucho por él”.
El costeño se quedó con las ganas de venir a Nicaragua y aportar sus conocimientos para la Selección Nacional que nos representará en las Eliminatorias del Clásico Mundial de Beisbol, en Panamá. “Estaba entusiasmado, lástima que al final no fue posible que integrara el equipo”, declaró.
Ver en la versión impresa las páginas: 12 B
