Agencias
Es normal que se resientan y aparezcan grietas, durezas, entre otros problemas en nuestros pies.
Hay algunos consejos para que puedas olvidarte de los pies secos o agrietados y puedas ponerte unas buenas sandalias sin problemas. ¡Ahora es el momento perfecto para ponerlos en práctica!
Para combatir la resequedad podemos empezar por eliminar las células muertas con una piedra pómez. Pásala mediante movimientos circulares por las zonas más secas o con durezas. Es un procedimiento que es mejor realizarlo en seco.
A continuación lo que podemos hacer es dejar en remojo nuestros pies en agua tibia con jabón durante aproximadamente quince minutos. Existen jabones especiales para este tipo de problemas que ayudan a suavizar la piel seca. Si lo deseas puedes utilizar en lugar de jabón, medio vaso de vinagre o zumo de limón. Aplica una buena capa de crema o de algún hidratante específico para los pies.
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