Noel Amilcar Gallegos
Vacía. Así luce la terminal de Masaya, como vacíos están los bolsillos de los comerciantes que fueron trasladados a las calles aledañas al mercado municipal Ernesto Fernández. Esto lo afirman ellos con mucho malestar pues debido a las obras que está realizando la Alcaldía fueron reubicados temporalmente, pero se han atrasado.
LA PRENSA buscó la versión de la Alcaldía para conocer los motivos del atraso, pero no ha sido posible que nos atiendan.
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La Alcaldía, administrada por el sandinista Félix Trejos, se propuso realizar un adoquinado en forma de “U” que inicia desde la entrada de los vehículos hasta la salida de estos. El adoquinado será de un poco más de dos mil metros, de los 22 mil metros que comprende esta terminal.
Los comerciantes fueron ubicados en las calles aledañas de este populoso centro de compras y afirman que en ese lugar se ha formado un caos y las ventas han menguado.
“El movimiento del negocio está mal. Las ventas están bajas, la gente entra poco aquí donde estamos ubicados. Cuando estábamos adentro (de la terminal) había más movimiento y ventas”, se queja doña Rosa Zambrana.
Ronald Rosales, presidente del Sector Huerta, dice que las ventas están cayendo a medida que pasan los días y no se avanza con el mencionado proyecto.
“En un momento nos alegramos porque el alcalde nos había prometido que la obra estaría lista en cinco días, pero ya pasaron y no vemos siquiera el movimiento de tierra. Si esto va para largo, vamos a tomar medidas. Nuestros clientes andan perdidos y eso causa problemas para ellos y para nosotros”, dijo Rosales.
Carlos Calero, vendedor de agua helada, señaló que no se ha vendido nada porque “la gente anda desconcertada porque no halla a los comerciantes que les venden siempre”.
Los comerciantes también indican que los compradores tienen que caminar tramos más largos con la carga a cuestas para lograr llegar a su unidad de transporte.
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