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Cartas al Director

¿Votar o no votar?

Para toda persona que se precie de ser seria, esta es una situación muy difícil, pues se antepone el deber. Pero uno piensa en el honor, eso que demasiados nicaragüenses han perdido o vendido por diez pliegos de zinc, una chanchita preñada, o una gallina con su gallo. Resulta penoso aceptarlo pero así e. ¿Valen tan poco el honor y el orgullo de estas personas que han recibido esas dádivas de los Ortega Murillo a cambio de su voto? No podemos ocultar y mucho menos negar que en Nicaragua hay hambre, pero cuando una persona es digna, se las ingenia para comer; trabajo decente aunque duro abunda y bien podríamos realizar labores que nunca hemos siquiera intentado para ganarnos el pan de cada día y defender nuestro orgullo nica, pero cuando ese orgullo se pierde sin haber luchado por sus ideales, la persona deja de serlo para convertirse en borrego, o como dicen los sandinistas “en masa”, y no hay condición más deplorable para un ciudadano, que cuando lo convierten en eso.

Realmente comprendo a los miles y miles de nicaragüenses que no van a votar en las próximas “elecciones” municipales, pues ya los alcaldes fueron nombrados o ratificados en sus puestos de vergüenza y lo único que falta son las elecciones, situación que vivimos como en una de las chispeantes novelas de Gabo, o en una de las risibles jodarrias de Aniceto Prieto. Personalmente siento que es un deber de todo nicaragüense honesto ir a votar, pero también siento que es ridículo hacerlo, cuando todos los presentes en la mesa de votación se estarán riendo de cada opositor que llegue a depositar su voto en aquella pobre urna violada y “requeteviolada” por cada uno de los miembros del recinto.

Amigo nicaragüense: si es usted una persona honesta, antes de ir a votar, piénselo bien, y si es una persona de honor y no le gusta que se burlen de usted, no vaya, porque téngalo por seguro: abundarán las carcajadas, igual que hace cuatro años y los nicaragüenses honestos nos merecemos respeto.

Ramón Pineda, Jinotega

Elecciones municipales

En las elecciones municipales del próximo 4 de noviembre, convocadas por el Consejo Supremo Electoral (CSE) de facto, los partidos que participan saben que no tienen ninguna posibilidad de ganar, se conforman con las pocas alcaldías de menor cuantía, que les quiera otorgar el orteguismo. Ahora las condiciones son más adversas, muchos ciudadanos opositores están cansados de tanto fraude, por lo cual han decidido no participar. No se sustituyó al CSE de facto, mucho menos se depuró el padrón electoral.

Pueden invitar a la OEA aunque sus representantes informen las anomalías, pero el secretario general José Miguel Insulza las engavetará y guardará silencio, al igual que a los organismos de observación nacional, a última hora para no dar lugar a depurar el padrón electoral.

Se han eliminado las fotos de los candidatos a alcaldes, vicealcaldes y los nombres de los concejales, para confundir a los votantes y debilitar la autonomía municipal. Así Ortega controla las alcaldías que ahora son el partido. Los ciudadanos independientes que no tienen partido, y que representan el 60 por ciento de la población, no votan por candidatos impuestos de dedo que serán manipulados, lo que desmotiva al ciudadano a votar, lo cual es otro zarpazo a la democracia y un avance de la dictadura orteguista. Los partidos participantes no exigieron la corrección de esa disposición antidemocrática del de facto CSE, quienes actúan como mansos corderos al despeñadero, lo que facilita la destitución de los alcaldes que se resistan a ser manipulados por el dictador inconstitucional.

Los partidos participantes solo van a legitimar las alcaldías que se van a adjudicar el orteguismo y conformarse con las migajas, aceptando el veredicto del presidente de facto del CSE, Roberto Rivas, y demás comparsas, colocándose en la misma posición del PLC arnoldista, desprestigiado y reducidos al mínimo.

Luis Solórzano, Granada

Aclaración: No hubo favoritismo en licitación

En el reportaje aparecido en este periódico de circulación nacional con fecha 16 del mes en curso, titulado: Favoritismo en licitación de escuela, aparecen citadas algunas situaciones propias de todo proceso de licitación, puntualmente algunas que directamente involucran nuestra participación en dicho proceso.

Al respecto y por considerarlo de vital observancia queremos dejar en claro que no existe interés alguno en esta empresa en verse involucrada en situaciones que de alguna manera evidencien manipulación sobre un proceso en el que nuestro único rol fue el de participar como oferente calificado en el país, peor aún si no se cuenta con evidencia cierta de que exista tal favoritismo sobre algún otro participante, en este proceso o cualquier otro en el cual se hubiera participado en el Mined.

Somos fieles creyentes de la profesionalidad de las personas que manejan estos procesos, y si bien es cierto en algún momento no estamos de acuerdo con los resultados obtenidos, actuamos con correspondencia a lo que la ley nos permite, sin descalificar el actuar individual o conjunto de los diferentes funcionarios que conforman los comités de licitaciones en las entidades.

En tal caso agradecería que publique esta aclaración, tal y cual se expone, reiterando que no queremos que el nombre de esta empresa se preste a manipulaciones o malas interpretaciones a la hora de señalar supuestas anomalías en entidades públicas o privadas.

Ing. Pablo Emilio Núñez Brenes, gerente general Construcción Núñez

Los costos del divorcio 

En el debate del divorcio, se olvida ponderar su herencia negativa sobre el Estado y sobre el mismo individuo. Los costos sociales, morales y económicos que este ocasiona demanda la necesidad de proteger la unidad familiar. The Economist destacaba hace algún tiempo que en Gran Bretaña el 77 por ciento de las madres separadas y sus hijos acaparaban los fondos sociales dirigidos a combatir la extrema pobreza, comprometiendo una parte importante de los recursos del país. Un informe derivado de los centros correccionales juveniles de EE. UU. muestra que un 33 por ciento de los delincuentes procede de padres divorciados/separados y un 44 por ciento de padres que nunca se casaron; el gasto en mantenimiento de prisiones y presos podría evitarse si los gobiernos ofrecieran consejeros/mediadores matrimoniales que sostuvieran las relaciones familiares.

Asimismo, se multiplican por seis los casos de abuso infantil cuando aparecen nuevos padres. Entre los divorciados o separados hay de entre tres y cinco veces más probabilidades de morir por accidente, suicidio, homicidio y cirrosis. Por su parte, un estudio de J. Hoffman y R. Johnson concluye que las tasas de alcoholismo, promiscuidad sexual y drogadicción son mucho menores en los hijos criados en matrimonios intactos.

Eva Catalán, Asunción, Paraguay

Cambio de juguetes

Como de muy interesante se puede calificar la campaña en pro de la niñez nicaragüense que está llevando a cabo actualmente en el departamento de León la Asociación Internacional de Juego (IPA) con hermanamiento Hamburgo-León; la cual les está cambiando a los menores de edad sus juguetes belicosos por no belicosos, para después quemar estos juguetes violentos y convertirlos en trofeos por la asociación vínculos solidarios.

Ojalá que otras instituciones tanto públicas como privadas que trabajan para la niñez nicaragüense tomen muy bien en cuenta esta magnífica campaña que ayuda a construir la paz en los hogares nicaragüenses que tanto hoy la necesitan y así los niños podrán desarrollarse como personas normales para gran futuro de nuestra Nicaragua.

Salvador Pérez González

Opinión Elecciones municipales Nicaragua Votación archivo

COMENTARIOS

  1. Cachinflin
    Hace 12 años

    Votar = avalar y legalizar el orteguismo lo que hay que hacer es salir a las calles a protestar.

  2. fultp
    Hace 12 años

    Votar en la elecciones, no es un deber, es un derecho individual de cada ciudadano. Hacer uso de ese derecho, es algo que actualemente, en Nicaragua, esta vedado para todo ciudadano que no confia en los integrantes del CSE, ya que estos han demostrado que son corruptos al haber propiciado fraudes electorales en las tres anteriores elecciones. Por tanto yo personalmente no votare en las proximas elecciones.
    Toda persona que opine por las mismas razones hara lo m ismo que yo haré.

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