Vladimir Vásquez
Los pescadores que utilizaban bombas en las playas de Tola para realizar sus actividades, recibieron un ultimátum de las autoridades locales para abandonar esa práctica.
Los trabajadores abandonaron las playas de Tola a eso de las tres de la tarde del viernes, luego de una reunión en la que participaron autoridades de Inpesca, Fuerza Naval y Alcaldía local.
Iván Ramírez de la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Sostenible (Fundenic) aseguró a LA PRENSA que el problema de la pesca con bombas estaba provocando daños al ecosistema local.
Las bombas no son utilizadas para matar a los peces que se acopiarán, si no que destruyen a los animales más pequeños para que sirvan de carnada para los peces más grandes que son los acopiados.
Los pescadores se identificaron como trabajadores de la empresa Mariscos 4 Estaciones (M4E), para quienes acopiaban el producto.
LA PRENSA intentó comunicarse con representantes de la empresa, pero aseguraron que no estaba el vicegerente que podía dar declaraciones sobre el caso.
Fundenic reportó la muerte de más de cinco tortugas como consecuencia del uso de bombas en playa El Gigante y cerca de Guacalito de la Isla, donde operaban los pescadores.
El grupo ambiental también mantiene vigilancia sobre la aparición de un delfín en las cercanías a La Boquita, Diriamba y cuyas causas de muerte no han confirmado.
En El Salvador se encontraron dos espécimenes, uno de ellos, hembra que murió la noche del jueves, según la Fundación Zoológica de El Salvador.
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