Auxiliadora Del Carmen Ramírez*
El inicio de este año escolar para mí fue sorpresivo, porque después de ser maestra de alumnos de quinto y sexto grado me asignaron a los pequeños de primero.
Psicológicamente me afectó mucho porque no entendía que a veces el ser humano es vulnerable a los cambios. Sin mucho entusiasmo acepté este reto, sin imaginar lo que vendría después.
Poco a poco fui entendiendo que mi vocación como maestra me obliga a ser incluyente. Me di cuenta que era muy importante continuar la obra iniciada por la maestra de preescolar y vi que en mis manos tenía el tesoro de una infancia que empieza la vida y en donde nosotros, los docentes, somos el principio de su éxito o su fracaso futuro.
Todo conocimiento pasa por la lectura y la escritura y como me gusta contribuir a mejorar la calidad de la educación y conocer nuevas estrategias, me inicié en el aprendizaje de la tecnología informática para aplicarla en la enseñanza dentro del aula. Y también he podido brindar reforzamiento a mis alumnos con dificultades de aprendizaje.
Esto lo hago en horario extracurricular, pero mi mayor satisfacción consiste en desarrollar habilidades y destrezas en estos niños, porque enseñar a leer y escribir es —además de compartir conocimientos— dar amor y recibir una sonrisa sincera a cambio.
Conocer las historias de vida es comprometernos con Dios y la patria. Es compartir la alegría y alcanzar la meta de que estos pequeñitos aprendan sus primeras letras y pasen satisfactoriamente el año escolar.
He compartido mi experiencia con mis compañeros de trabajo y les he manifestado que el cambio que al principio rechacé en mi interior, hoy me llena la vida.
Un nuevo entusiasmo ha despertado en mí al dar clases a niños y niñas de corta edad y apoyar especialmente a los que tienen mayores dificultades para aprender.
Mi lección aprendida es que no importa el espacio en el que nos coloque la vida, lo importante es estar abiertos a los cambios y disfrutar de las nuevas experiencias.
*Reforzamiento Educativo y Primer Grado, Escuela Asunción de María.